VALÈNCIA (EP/VP). El Juzgado de lo Penal número cuatro de València ha condenado a la periodista Tona Català, mujer del presidente de Les Corts, Enric Morera, al pago de una multa de 900 euros y a indemnizar con 3.000 euros a Luis Salom, asesor del PP en el Ayuntamiento de la capital, por insultarle en una red social con las expresiones "puto fatxa" y "maricón d'Espanya".
La magistrada considera a Català autora de un delito de injurias graves con publicidad, sin circunstancias modificativas de la responsabilidad. Contra la resolución, cabe recurso de apelación.
La jueza estima probado que Salom es una persona pública no solo por el desempeño de un cargo público sino porque con anterioridad ya aparecía "con cierta frecuencia" en los medios de comunicación por su "afinidad" con políticos y cargos del PP y entiende que si bien las palabras de Català no contribuyeron "de manera significativa" a la imagen que el asesor proyectaba de forma pública, sí se vio afectado su honor.
No obstante, sostiene que la cantidad indemnizatoria "más ajustada a la realidad" de los insultos es de 3.000 euros y no los 20.000 que había reclamado el querellante, que además pedía 5.400 euros de multa.
La magistrada considera probado que Català publicó en enero de 2016 en su muro de Facebook un mensaje público -en abierto- en el que adjuntaba una foto de Salom con un texto en el que incluía, entre otras, las expresiones "puto fatxa, maricón d'Espanya, adoptat per uns güelos de l'Opus".
Català aseguró en la vista que se arrepentía del texto, del que ya había hecho una rectificación y que ya lo había dicho en el acto de conciliación. Asimismo, argumentaba que estaba "muy cansada" porque Salom llevaba "tres años arremetiendo contra su hija, que era menor de edad, a través de las redes sociales decía que era una 'guarra'". La periodista aseguraba que era "todo por su marido", Enric Morera, y añadía que no quisieron denunciar por sus circunstancias personales en ese momento.
La publicación fue el mismo día en que se publicó una noticia sobre la investigación del presunto blanqueo de dinero del PP en el caso Taula, en el que Salom figura como investigado.
Para la magistrada, las expresiones escritas por Català y el sentido de todo el texto en general es "claramente ofensivo" y constituyen "claramente un atentado contra el honor" de Salom, al no contener imputación de hechos sino juicios de valor, con un ánimo difamatorio "inherente" a su uso.
Además, al haber sido publicadas en una red social, exceden del ámbito privado y no están conectadas con el ejercicio de un derecho fundamental como la libertad de expresión o de información, al no llevar aparejadas informaciones, hechos o actuaciones para valorar o criticar.
La jueza también descarta que Català haya pedido perdón en las dos ocasiones en las que asegura haberlo hecho: ni en el acto de conciliación ni en la carta en la que rectificó el primer (donde dice que no está orgullosa pero justifica las expresiones). Sí lo hizo en el juicio, aunque el asesor no se lo admitió.