VALÈNCIA. La accionista de Nisa Teresa Nebot Oyanguren es la persona que este viernes se adjudicó en pública subasta el paquete de 42.639 acciones pertenecientes a la Generalitat. Así lo confirmó ella misma a Valencia Plaza.
La puja, la única que llegó, la realizó en sobre cerrado que fue abierto este viernes en la sede de la Conselleria de Hacienda. La oferta era de 13,50 euros por acción, frente a los 10,80 euros en que se fijó el precio de licitación, según informó la Generalitat. Esto supone que el precio de venta supera en un 25% el de licitación y la Conselleria ingresará 575.626,50 euros.
Teresa Nebot es una de las pocas accionistas que no se posicionó en la batalla accionarial que libraron los pequeños accionistas y el grupo catalán Vithas, que finalmente se hizo con la mayoría accionarial. Ni se comprometió a vender a Vithas ni se integró en el sindicato Accionistas x Nisa, formado por unos 300 socios minoritarios. En la fase más encarnizada de la batalla, el grupo catalán llegó a controlar el 47% del capital, y Accionistas x Nisa, más del 51%.
En medio quedaron algunos minoritarios, entre ellos Teresa Nebot, que tenía en torno al 0,8%. Con el 36% adquirido ahora a la Generalitat, supera el 1%.
El pasado mes de mayo, la Conselleria de Hacienda y Modelo Económico publicó en el Diario Oficial la subasta de este paquete de 42.639 acciones propiedad de la Generalitat, producto de la herencia abintestato de Emilio Claver Carbonell.
Como publicó Valencia Plaza, el precio de salida era muy inferior al pagado por el grupo hospitalario Vithas en la guerra accionarial que mantuvo con la mayoría de los pequeños accionistas, a los que acabó abonando 24,5 euros por acción en 2017 y hasta 30 euros por título si aceptaban vender en el año 2022. La Generalitat explicó entonces que el precio de salida se había fijado tras una tasación, como es preceptivo, y que estas acciones ya no podían beneficiarse de la oferta de Vithas.
La directora general de Sector Público, Modelo Económico y Patrimonio, Empar Martínez Bonafé, destacó que "es la primera vez que la Generalitat subasta con pública concurrencia acciones o títulos de su propiedad, con las dificultades que ello conlleva, y podemos decir que el resultado ha sido todo un éxito".
"Estamos hablando de unas acciones cuyo valor fluctúa en el mercado por lo que es muy coyuntural y resulta difícil determinarlo para un momento concreto con meses de antelación por los procesos reglados de pública subasta que estamos obligados a seguir, y que dificultan anticipar con exactitud la fecha en que se va a poder materializar la venta, lo que añade aún más dificultad al proceso", explicó la directora general.
Empar Martínez recalcó que para llevar a cabo este proceso de subasta, además de recabar los informes tanto de la Abogacía como de la Intervención de la Generalitat, la Dirección General de Sector Público, Modelo Económico y Patrimonio está obligada a solicitar una tasación independiente, que fue quien fijó el precio de 10,80 euros por acción. "El precio establecido en esa tasación externa fue el que se publicó como precio base de licitación para la subasta, en la que finalmente hemos obtenido un 25% más", concluyó la directora general.