ALICANTE. Una firma murciana especializada en acudir a las liquidaciones de empresas para hacerse con sus 'restos' a precio de derribo, Nibox Inversiones, fue la que se llevó el gato al agua en la venta de la flota de autobuses de la empresa de transportes Autocares Ríos Alicante, en liquidación desde abril de 2021. Según consta en el último informe del administrador concursal sobre la marcha del proceso, fechado el pasado febrero (cuando el juez aprobó el plan de liquidación, aunque está pendiente de un incidente concursal), la concursada ingresó unos 190.000 euros por la subasta.
Nibox Inversiones fue la adjudicataria de la flota (excepto algunos vehículos que estaban en régimen de leasing) recién renovada, con una puja de 173.420 euros, según consta en el informe. A esta cantidad hay que sumar los 7.475 euros (el 5% del importe de la licitación) que la empresa murciana tuvo que depositar por anticipado para poder pujar. En total, la adquisición de los autocares salió por casi 181.000 euros. Y a esta cantidad hay que sumar otros 7.475 euros que ingresó otra firma, Gestión de Cobros y Activos del Sureste, por participar en la licitación.
Las dos firmas que participaron, curiosamente, tienen su sede en Murcia, donde está ampliamente implantada la empresa Autocares Ríos original (las dos empresas no tienen relación, aunque los fundadores de la alicantina tienen vínculos familiares con la murciana). No es la única coincidencia, pues las dos licitadoras están especializadas en concurrir a este tipo de ventas en fases de liquidación de empresas con problemas. Nibox Inversiones, sin ir más lejos, se quedó en diciembre de 2019 la unidad productiva de la también murciana Halcón Foods, también en liquidación, por apenas 37.000 euros (y la asunción de la deuda).
La murciana ha hecho un buen negocio con la liquidación de Autocares Ríos Alicante, ahora renombrada como Wintermere Canal, pues según las fuentes del sector consultadas por Alicante Plaza los 180.000 euros que pagó el pasado otoño por la flota de la empresa de transportes equivalen al precio de tan solo dos autocares de nueva matriculación. Además de la venta de los autobuses, como adelantó este diario el jueves, el administrador concursal ha realizado derechos de cobro y liquidez por un valor total de 400.000 euros.
Pero la clave de la liquidación es la cochera de Autocares Ríos Alicante, el activo de mayor valor en el balance de la empresa, y cuyo futuro aún no se ha decidido. A pesar de haber aprobado el plan de liquidación con la cochera incluida, el mismo juzgado dictó una diligencia de ordenación una semana después (el 9 de febrero) en la que admite que la sentencia que avalaba dicha inclusión, consecuencia de un incidente concursal promovido por los propietarios de la mercantil, aún no ha adquirido firmeza. El administrador concursal, de hecho, ha recurrido dicha diligencia para intentar poner a la venta las instalaciones.
Autocares Ríos Alicante (distinta de la empresa del mismo nombre con sede en Murcia, aunque en origen tenían el mismo propietario) comunicó a finales de noviembre de 2019 a su plantilla y a sus clientes que cesaba su actividad, tras perder el concurso de transporte escolar, y a finales de enero despidió a casi toda la plantilla. Durante un tiempo intentó colocar sus rutas a otras firmas, en busca de una posibilidad de supervivencia. No obstante, un mes más tarde se abría el concurso de acreedores en el juzgado de lo Mercantil 1 de Alicante, que en abril de 2021 desembocó en su liquidación.
La deuda pendiente con los empleados despedidos antes y durante el concurso podría acercarse a los dos millones de euros. El Fogasa se ha subrogado algunos créditos concursales y contra la masa relacionados con las reclamaciones de salario de empleados, al haberles abonado el salario y la indemnización. A fecha de apertura de la fase de liquidación, el crédito contra la masa del Fogasa superaba los 350.000 euros. En total, dicho crédito contra la masa (el generado después de la apertura del concurso, a comienzos de enero) asciende a 1,6 millones de euros, la mayoría por salarios.