Unai Extremo (Virtualware): "Hay que crear realidades virtuales que resuelvan problemas reales"

VALÈNCIA. En el ámbito de la innovación digital, el nombre de Unai Extremo, consejero delegado de la recientemente cotizada tecnológica Virtualware (MLVIR), ha resonado cada vez con más fuerza en los últimos dos o tres años. La empresa fundada en Bilbao hace casi 20 años -cuando la realidad virtual era poco más que un concepto filosófico- ha sido reconocida ya como la más innovadora en su sector de todo el mundo. Todo un dato a tener muy en cuenta.

MLVIR, que despidió el pasado año con unas ventas de más de 3,2 millones, se ha marcado para el ejercicio actual un crecimiento a doble dígito, mientras mantiene su apuesta clara por aumentar su posición en el exigente mercado norteamericano. Todo ello desarrollando aplicaciones de realidad virtual para algunos de los conglomerados industriales más importantes del mundo en campos como la energía nuclear, las infraestructuras críticas, la defensa y la sanidad.

Fundada en 2004 por Unai Extremo y Sergio Barrera -director de Tecnología de la empresa-, con sede en Bilbao, oficinas en Europa y Estados Unidos, Virtualware salió a cotizar en el Euronext Access de la Bolsa de París el pasado 20 de abril con una valoración de 27,252 millones de euros y a un precio de 6 euros por acción. Y no le ha ido nada mal porque al cierre de la sesión del 2 de agosto -último día que logró cruzar operaciones a la hora de escribir estas líneas- cotizaba a 8,55 euros, es decir, un 42,50% por encima y en máximos históricos. De este modo su capitalización ascendía hasta los 38,834 millones de euros.

Hace unas fechas, el 18 de julio, el que ya es líder europeo en la industria de la realidad virtual industrial presentó los mejores resultados semestrales de su historia. Concretamente presentó unos ingresos totales por valor de 2,149 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 44,71% con respecto al año anterior. La mayor parte de este crecimiento se debió a los ingresos generados por los planes de suscripción de VIROO -plataforma VRaaS que ha democratizado la realidad virtual-, que ascendieron a 630.000 euros tras catapultarse un 208,23%. 

Pero nada mejor que hablar con el propio CEO, Unai Extremo, que atendió amablemente la llamada de Valencia Plaza para hablar del futuro de la tecnología, de cómo se combina con la inteligencia artificial y un poco de esa idea un poco espectral que es el metaverso. A principios del próximo mes de septiembre comenzará el road show español de la compañía y será el 'cap i casal' el punto de partida. A continuación, la charla mantenida con el consejero delegado:

-En primer lugar, ¿sirve la realidad virtual para algo o hablamos de otra moda más?
-Si fuera una moda no llevaríamos 20 años en la industria. Lo que pasa es que en los últimos dos o tres años, el mal entendido concepto del metaverso lo ha confundido un poco todo. La realidad virtual tiene que servir para mucho más que para aislarnos del mundo porque suficientes problemas nos han traído ya las redes sociales. De lo que se trata es de crear realidades virtuales que resuelvan problemas reales. La realidad virtual -más que una moda pasajera- es una herramienta que va a revolucionar los segmentos industriales y la forma en la que trabajamos, prototipamos, conceptualizamos y creamos y aprendemos. 

"VR for Industry es una idea que adoptamos para destacar el papel crucial que puede desempeñar la realidad virtual en los sectores industriales"

-Entonces, ¿son reales las aplicaciones de la realidad virtual?
-Así es por muy paradójico que parezca. En Virtualware hacemos desde simuladores de plantas nucleares que utilizan algunos de los 'blue chips' más grandes del mundo hasta simuladores donde entrenan médicos desplegados en el campo de batalla pasando por espacios donde se crean vehículos, se aprenden a arreglar turbinas o donde se preparan los técnicos de ADIF para entender cómo funciona una catenaria. Así que imagina.

-Ustedes acuñaron el concepto VR for Industry o Realidad Virtual para la Industria. ¿Eso sí realmente tiene futuro?
-No solo lo tiene sino que es una realidad presente y creciente. VR for Industry es una idea que adoptamos para destacar el papel crucial que puede desempeñar la realidad virtual en los sectores industriales. Cuando una industria adopta nuestra tecnología crece más rápido, crea más rápido y puede conceptualizar de forma remota. Los avances en hardware y software han hecho que la realidad virtual sea más accesible y eficaz que nunca. Si bien la penetración de las gafas de realidad virtual en el mercado de consumo ha crecido, aún no ha pasado de ser un pie de foto. En aspectos industriales, hay equipos de marcas como Pico -propiedad de Bytedance, los dueños de TikTok- o HTC que realmente son ciencia ficción.

-¿Algún ejemplo al respecto?
-Las industrias de todo el mundo ya están aprovechando esta tecnología para mejorar la formación, facilitar la colaboración, aumentar la seguridad y optimizar los procesos de diseño y producción. Imagina, por ejemplo, un entorno industrial en el que los trabajadores aprenden a arreglar catenarias sin tener que exponerse a las descargas eléctricas. Pues eso es VR for Industry y en este sentido algunos de los nombres más grandes del mundo como GE Hitachi Nuclear Energy, y universidades internacionales como McMaster en Canadá, ya han apostado por ello.

-Hace unas fechas anunciaron los mejores resultados de su historia. ¿Qué balance hace?
-En el primer semestre registramos ingresos por valor de 2,1 millones y eso es más de un 44% que en el mismo periodo del 2022. Pero sobre todo lo más importante es que nuestra línea de SaaS -nosotros los llamamos VRaaS, VR as a Service-, que es un modelo de negocio basado en la suscripción y que permite a creadores y compañías de todo el mundo crear y desplegar aplicaciones de realidad virtual de forma fácil y rápida. Todo esto ha sido el gran impulso de ese resultado.

"Llevamos suficientes años en el negocio como para saber que una de las grandes barreras de nuestro mercado son los costes elevados y la dificultad tecnológica"

-¿Está hablando de VIROO?
-Se trata de nuestra respuesta a los cambios tecnológicos. VIROO nació para permitir a desarrolladores y empresas de todo el mundo crear sus propias soluciones de realidad virtual, y adaptarlas a segmentos productivos. Llevamos suficientes años en el negocio como para saber que una de las grandes barreras de nuestro mercado son los costes elevados y la dificultad tecnológica, así que nosotros creamos una especie de Canva -software y sitio web de herramientas de diseño gráfico simplificado- para el mundo de la realidad virtual. VIROO, que ya tiene una patente en Estados Unidos, pretende convertirse en el estándar mundial para el desarrollo de aplicaciones VR multiusuario, permitiendo construir, manejar y desplegar proyectos inmersivos sin restricciones.

-VIROO ha experimentado un aumento considerable en cuanto a ingresos y demanda. ¿Qué características o ventajas distintivas tiene que han atraído a tantos clientes?
-VIROO es única porque es una solución completa y fácil de usar que permite a las empresas aprovechar el poder de la VR sin necesidad de grandes conocimientos técnicos. Hemos creado una plataforma en la que se pueden desarrollar e implantar aplicaciones remotas de VR multiusuario, lo que ha resultado muy valioso para sectores que van desde la educación a la energía hasta la medicina. Además, nuestro soporte dedicado y nuestras constantes actualizaciones mantienen a nuestros clientes satisfechos y a nuestro producto a la vanguardia.

-¿Para eso salieron a bolsa?
-Para eso y para otras cosas. Salimos para ganar visibilidad de mercado, aumentar nuestra base accionarial y reforzar nuestra propuesta de valor. Y lo hicimos en París, en Euronext, porque nuestra vocación es internacional y europea donde la mayoría de nuestros clientes están en el extranjero.

-Por cierto, ¿cuántas empresas de realidad virtual cotizáis?
-No somos tantas las empresas del sector que cotizamos. Hay una empresa irlandesa (Engage XR), que lo hace en Londres; y Glimpse Group, que está en el Nasdaq estadounidense. Y por supuesto, compañías como Meta, que hace otras muchas cosas; o HTC, un fabricante de dispositivos VR de Taiwán que viene de la industria de fabricación de dispositivos móviles.

"Salimos a bolsa para ganar visibilidad de mercado, aumentar nuestra base accionarial y reforzar nuestra propuesta de valor"

-¿Emociona tocar la campana?
-Mucho. Y en París más.

-¿Cuántos inversores tienen actualmente?
-Rondamos el centenar y mostraron su satisfacción al ver cómo la acción llegó a dispararse casi un 42% a las pocas semanas de salir a bolsa y también a finales de julio, cuando en ambos casos marcó los 8,50 euros por título.


-¿Tienen previsto saltar a otros mercados?
-En cuánto lo considere Euronext queremos pasarnos a BME Growth. De ahí, probablemente, al OTC Markets en Nueva York a través de un dual listing. Llegar a los inversores de Estados Unidos es importante para nosotros.

-Se oye mucho del metaverso, pero todavía no conozco a nadie que tenga unas gafas de realidad virtual en su casa...
-Y sin embargo hay centros de entrenamiento de grandes empresas donde hay decenas de pares. Al final, la vida real es mucho más interesante que la realidad virtual, que tiene todo el sentido del mundo cuando se incluye en el día a día de las compañías, en procesos de entrenamiento, aprendizaje, simulación o prototipado. Dicho esto, nosotros tenemos un almacén lleno de cascos y gafas. Son dos décadas probando y testeando.

"Llegamos a simular los encierros de San Fermín hace 20 años y eso sí que parecía ciencia ficción"

-Mirando al pasado, ¿qué tipo de realidad virtual hacían hace 20 años?
-Pues llegamos a simular los encierros de San Fermín, ¿te lo puedes creer? Aquello sí que parecía ciencia ficción (sonríe).

-La expansión mundial de Virtualware parece estar en pleno apogeo con una impresionante lista de clientes y socios. ¿Cómo han conseguido establecer relaciones comerciales con empresas e instituciones internacionales tan destacadas?
-Nuestra expansión global se ha visto impulsada por una combinación de factores. Tenemos un producto sólido y adaptable en VIROO, que satisface las necesidades de empresas e instituciones de distintos sectores. En este momento estamos desarrollando una comunidad internacional de desarrolladores que utilizan VIROO para servir a sus industrias locales. La plataforma se utiliza en Taiwán, Corea deal Sur, Estados Unidos, Canadá, en buena parte de América Latina y en muchos centros de formación de España, algunos de los cuales están en nuestra tierra, el País Vasco.


-¿Qué nos puede contar del 'road show' que inician en septiembre?
-Pues que València será el punto de partida por cosas de nuestros asesores (vuelve a sonreír) porque son de allí. Posteriormente iremos a Madrid, Barcelona, Londres y Fráncfort.

-Se dice que su asociación con Sergio Barrera es la piedra angular de Virtualware. ¿Puede hablarnos de su relación con él y de cómo ha dado forma a la empresa?
-Sergio -y esto se lo he oído decir a algunos de los mayores expertos de Estados Unidos- es uno de los mejores CTOs en el mundo de las tecnologías inmersivas. Resucitó la tecnología Cave (Computer Aided Virtual Environments) cuando nadie daba un duro por ello, empezó a desarrollar tecnología de realidad mixta hace años y, en general, siempre parece estar cinco años en el futuro. Además, tengo que añadir que es mi amigo y mi socio desde hace dos décadas.

"A veces la gente se extraña cuando una empresa de realidad virtual habla de mejorar el mundo que nos rodea, pero la verdad es que nuestro compromiso con la sostenibilidad o la equidad es real"

-Tampoco puede olvidar al resto del equipo...
-Cierto es porque más más allá de Sergio -o de mí- el corazón de Virtualware reside en su gente. Nuestro equipo es un grupo de personas apasionadas, inteligentes y creativas que trabajan incansablemente por nuestra visión compartida. Por eso, cuando salimos a bolsa repartimos acciones a todos los empleados que han estado con nosotros desde hace más de un año, que son la gran mayoría.

-Por último, usted que está profundamente implicado en la tecnología, ¿cómo cree que las empresas del sector pueden equilibrar su crecimiento manteniendo al mismo tiempo un compromiso con el planeta y su gente?
-A veces la gente se extraña cuando una empresa de realidad virtual habla de mejorar el mundo que nos rodea, pero la verdad es que nuestro compromiso con la sostenibilidad o la equidad es real. Hacemos informes de responsabilidad social desde antes de que nos los pidiera nadie y tratamos de abogar por un mundo donde la realidad virtual absorba parte del golpe de la actual situación ambiental o social del mundo.