LA NUCÍA. La crisis inmobiliaria afectó a la Marina Baixa tanto como en el resto de España. Una de sus consecuencias es visible desde la carretera CV-70 en La Nucía con una hilera de viviendas sin terminar y con el ladrillo a la vista. Pero la imagen de abandono va a ser cosa del pasado. Una promotora murciana ha retomado la construcción para terminar el conjunto de adosados, pareados y aislados. Se trata de la promoción 'Nwcia Village', para la que ya cuentan licencia y piso piloto.
La empresa responsable de este proyecto es Intrum Homes Developers (IH Developers). En conversaciones con la empresa, explican a Alicante Plaza que el proyecto se hará en dos fases en una parcela que cuenta con más de 9.000 metros cuadrados. En total, 28 hogares con zonas comunes en la urbanización. La obra de la primera fase, con las primeras 14 viviendas, prevén iniciarla en enero de 2025 con el objetivo de entregar las llaves el primer trimestre de 2026. Para la segunda fase habrá que esperar un poco más, ya que se contempla el último trimestre de 2026.
Como viene siendo habitual en la Marina Baixa, las viviendas que salen nuevas a la venta no son aptas para todos los bolsillos. Cuentan con un rango de precios desde los 390.000 euros a los 575.000 euros. Y mercado tienen. La compañía estrenó el piso piloto en el mes de septiembre y desde el inicio de ventas, ya cuentan con un 40% de casas reservadas, tal y como informan desde la empresa, que concretan que las nacionalidades de los clientes son del norte y este de Europa y de Estados Unidos.
Como se decía, se trata de un complejo residencial ya iniciado hace años. Sin embargo, desde la promotora señalan que solo se conservará la estructura de estas casas. Han optado por rediseñar por completo la promoción y adaptarla a la normativa y tendencias actuales. Entre otras cuestiones, se incorporan sistemas de climatización sectorizada, producción de agua con fuentes renovables, generación fotovoltaica y aerotermia. Una serie de elementos que hace más de una década eran impensables y dan muestra del paso del tiempo y la evolución del sector.
Según ha podido comprobar este diario, una de las compañías responsables del proyecto que se inició ahora hace más de 15 años fue Inzama SL. Tal y como figura en la documentación pública, la empresa quebró en los peores años de la crisis inmobiliaria. El procedimiento concursal se abrió en 2007 y se resolvió en marzo de 2009 por el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Alicante. Desde entonces, parte de estos esqueletos han estado en manos del banco.