VALÈNCIA. En un momento en que existe cierta confusión sobre el número real de víctimas mortales de la Covid-19, algunas cifras pueden ayudar a calibrar la magnitud de la tragedia. Una de ellas es la comparativa entre el número total de fallecidos este año y el año anterior, que no estarán disponibles hasta que el Registro Civil facilite los datos. Otra, el número de entierros, que en la ciudad de València ya está contabilizado.
Los cementerios municipales de València registraron en marzo un incremento del 24% en el número de entierros y cremaciones comparado con el mismo mes del año anterior. Al igual que ocurre en el resto de España, el número de licencias de enterramiento se ha visto incrementado exponencialmente debido a la pandemia de coronavirus que azota el país.
Así, el número total de personas inhumadas o incineradas en València entre el 1 y el 31 de marzo fue de 774, frente a las 624 que lo fueron durante el mismo mes del año anterior. Los datos pertenecen a los cementerios municipales del Cabanyal, General, Grau, Campanar, Massarrojos, Benimàmet y El Palmar. La cifra total de fallecidos en la capital es mayor, pues a los 774 habría que sumar los sepelios de los cementerios parroquiales, pero sus datos no son públicos, por lo que no es posible saber el total de la ciudad. En cualquier caso, no es una cifra muy alta.
En el mes de marzo de 2020, es significativo el cambio en las cifras de la primera quincena del mes respecto a la segunda, en la que hubo un 20,9% más de sepelios. Entre los días 1 y 15 de marzo, se realizaron 22,5 inhumaciones y cremaciones diarias de media, mientras que entre el 16 y el 31, ya con el Estado de Alarma decretado, las cifras diarias subieron hasta los 27,2 diarios. Las cifras cuadran con el aumento de fallecidos que se produjo esa segunda quincena, pues muchas de las muertes eran de contagios previos a que se limitara el movimiento de personas el día 14.
Otro dato a tener en cuenta es que el número de fallecidos varía por año. Por ejemplo, y sin contar 2020, el año 2019 fue el que menor número de entierros registró de los últimos cinco años. Por eso la diferencia entre 2020 y 2019 es de un 24%. Sin embargo, 2018 fue el que mayor número de fallecidos hubo hasta ahora, con un total de 688 entierros y cremaciones, por lo que el incremento de sepelios respecto a ese año es del 12,5%.
Sobre las preferencias de las familias, en València se incinera mucho más que se entierra. En marzo de 2019, 400 personas, el 64% del total, fueron incineradas, frente a las 224 que fueron enterradas. Este año, la cifra ha bajado un poco situándose la cantidad de incineraciones en 508 de 774, un 62%. Es una variación pequeña que podría deberse a que la Covid-19 está causando muchas víctimas mortales entre la gente mayor, que normalmente prefiere ser enterrada.
Una de las incógnitas que quedan por resolver es el número total de personas fallecidas por coronavirus, pues en las cifras oficiales no aparecen aquellas a las que no se les ha practicado el test PCR de diagnóstico, aunque su certificado de defunción ponga que por posible coronavirus. Además, al estar prohibidas las autopsias por el riesgo de contagio, tampoco se puede certificar post mortem el positivo.
Esta diferencia ha puesto en alerta a las comunidades, y a la oposición política que acusa al Gobierno de Pedro Sánchez de ocultar los datos reales. A raíz de un estudio realizado por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha saltaron todas las alarmas. Dicho estudio decía que, según los datos del Registro Civil, las licencias de enterramiento relacionadas con la Covid-19 eran 1.921 frente a los 1.132 fallecidos oficiales, lo que suponía un 69,7% más que las cifras dadas por el gobierno autonómico, que son las que recoge el Ministerio de Sanidad.
En algunas CCAA como Cataluña, Navarra o Castilla León el número real de defunciones por coronavirus se estima que duplica el número oficial de muertes confirmadas por el Ministerio de Sanidad, llegando a existir en algunos lugares, una diferencia de un 140% entre los datos oficiales y los oficiosos.
De ser cierto, el número total de fallecidos no serían los 14.555 contabilizados hasta este miércoles por la autoridades sanitarias, sino que se superarían, de largo.
La Generalitat valenciana tampoco está contabilizando como fallecidos por Covid-19 a los ancianos a los que no llegó a hacerse la PCR.
Pero por el momento todo son especulaciones respecto de las estadísticas reales ya que hasta que el Ministerio de Justicia no haga públicos los datos que ha recibido de los registros civiles, los cuales tienen los certificados de defunción con las causas o las posibles causas, no se podrá hacer una estadística comparativa real. Aunque es cierto, según todas las fuentes consultadas, que el incremento en el número de entierros está asociado a las muertes por esta pandemia, y puede dar una idea de la magnitud de la pandemia.
El problema para que Justicia haga públicos los datos estriba en que el recuento de datos de defunciones que el Ministerio de Justicia pidió a los Registros civiles, para poder ofrecer una cifra objetiva sobre las muertes provocadas por la pandemia del coronavirus, está siendo más complicado de lo que se esperaba, ya que son muy pocos los trabajadores que acuden presencialmente a las oficinas, muchas de las partidas de defunción no ofrecen información suficiente y el correo electrónico habilitado para remitir toda la información recabada se ha colapsado.
Así lo ha denunció este martes la Unión Progresista de Secretarios Judiciales (UPSJ) en un comunicado, en el que aseguraban que debido a estas dificultades y otras, como que los juzgados de paz están cerrados, es "prácticamente imposible" que puedan enviar una relación completa de todos los datos registrados desde el 14 de marzo, cuando se declaró el estado de alarma por la pandemia del coronavirus, tal y como ha exigido el Ministerio de Justicia.