VALÈNCIA. València Turisme tendrá presencia activa en la nueva edición de la Feria B-Travel de Barcelona que se celebra desde este viernes hasta el próximo domingo. Así, la marca de turismo de la Diputació de València acudirá junto con los municipios de Cullera, Gandia y Oliva, que serán sus co-expositores en el stand de la Comunitat Valenciana.
"El incremento continuo de la competencia y los cambios que se están produciendo en la demanda actual requirieren una fuerte adaptación de los destinos y empresas turísticas de la provincia a las nuevas exigencias del mercado, por lo que la participación en este certamen contribuye a la mejora de su posicionamiento y a la fidelización del mercado catalán", ha explicado el responsable de Turismo de la Diputación, Jordi Mayor.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el mercado catalán es el cuarto emisor nacional para la Comunitat Valenciana y representa el 3,7% del total de viajes de españoles realizados a la región, así como el 4% de pernoctaciones registradas en la Comunitat en los últimos dos años.
B-Travel 2021 está dirigida tanto a profesionales del sector como a público general. El objetivo es reunir a organismos oficiales, ofertas de alojamiento, agencias de viaje y mayoristas y compañías de transporte. Además, también ahonda en ofertas de diferentes tipos de turismo, tales como el cultural, gastronómico, enoturismo, turismo activo, deportivo, industrial y turismo sostenible. Asimismo, incluye aspectos como los complementos de viaje, formación y servicios turísticos, náutica, camping y caravaning, turismo LGTB, oferta de cruceros, y la tecnología actual al servicio del turismo, entre otros ámbitos.
La Diputació ha explicado que cada año visitan la Comunitat Valenciana alrededor de un millón de turistas catalanes. En 2019 se produjo un descenso del 8,9% en número de viajes, aunque se incrementó un 10,6% el número de pernoctaciones. El incremento de la estancia media repercutió en un descenso del gasto diario.
En 2020 el impacto de la covid-19 se tradujo en un descenso del 50,2% de turistas catalanes en la Comunitat entre enero y septiembre, puesto que a partir de octubre entraron en vigor las restricciones a la movilidad entre comunidades autónomas y el cierre perimetral de la Comunitat Valenciana hasta fin de año.