BRUSELAS (EP). La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha reiterado al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que Bruselas sigue dispuesta a negociar un acuerdo comercial justo en respuesta al anuncio formulado por el mandatario norteamericano, en el que amenaza con la imposición de aranceles del 30 por ciento a las importaciones de la UE a partir del 1 de agosto, aunque se reserva la adopción de medidas de represalia "si lo ve necesario".
Von der Leyen, tras "tomar nota" de la carta de Trump, avisa de que la imposición de este gravamen "interrumpiría las cadenas de suministro transatlánticas esenciales, en detrimento de empresas, consumidores y pacientes a ambos lados del Atlántico".
La presidenta de la Comisión Europea ha indicado que "pocas economías en el mundo igualan el nivel de apertura y adhesión a prácticas comerciales justas de la Unión Europea", que "ha priorizado sistemáticamente una solución negociada con EEUU", lo que refleja "un compromiso con el diálogo, la estabilidad y una asociación transatlántica constructiva".
Von der Leyen insiste en que Bruselas sigue dispuesta "a seguir trabajando para alcanzar un acuerdo antes del 1 de agosto" pero avisa de que también "tomará todas las medidas necesarias para salvaguardar" sus intereses, "incluida la adopción de contramedidas proporcionadas si es necesario".
"Mientras tanto, seguimos profundizando nuestras alianzas globales, firmemente arraigadas en los principios del comercio internacional basado en normas", ha zanjado Von der Leyen.
Contramedidas en suspenso
La Unión Europea mantiene en suspenso un primer paquete de contramedidas sobre un volumen de 21.000 millones de euros en compras a Estados Unidos. Esta primera ronda de represalias a los primeros aranceles de Trump quedaron congeladas en abril por 90 días para "dar espacio a la negociación" con Washington, pero se reactivarán en la medianoche del lunes al martes si la UE no acuerda sobre la marcha una nueva prórroga.
El Ejecutivo comunitario, que habla en nombre de los 27 en política comercial, ultima un segundo paquete de contramedidas sobre cerca de 100.000 millones de euros de importaciones estadounidenses y, según fuentes europeas, podrían ponerse en marcha "muy rápido" si así lo decide la UE.
Entretanto, los ministros de Comercio de la UE se reunirán este lunes en Bruselas en una reunión extraordinaria para examinar las tensiones arancelarias con Estados Unidos y calibrar la respuesta, así como para abordar la necesidad de profundizar las relaciones comerciales con otros socios internacionales "fiables".
En la batalla comercial lanzada tras su llegada a la Casa Blanca, Trump activó aranceles del 50% sobre el acero y el aluminio europeo, de otro 25% sobre las importaciones europeas de vehículos y piezas y anunció otro 20% masivo sobre la mayoría de producciones restantes procedentes de la UE.
Con la tregua anunciada hasta el 9 de julio para dar margen a la negociación, el presidente norteamericano mantuvo en realidad los gravámenes sobre acero, aluminio y coches, si bien redujo temporalmente del 20 al 10% los otros aranceles, a los que Estados Unidos se refiere como "recíprocos" aunque no lo sean.
Sánchez apoya la negociación
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha apoyado las negociaciones de la Comisión Europea (CE) para tratar de alcanzar un acuerdo con Estados Unidos y acabar con los "aranceles injustificados" del 30 % que el presidente estadounidense, Donald Trump, pretende imponer a los productos europeos desde el 1 de agosto.
Sánchez ha dicho en un mensaje publicado en su cuenta de la red social X que "la apertura económica y el comercio crean prosperidad, pero los aranceles injustificados la destruyen".
"Por eso apoyamos y apoyaremos a la Comisión en sus negociaciones para alcanzar un acuerdo con EE.UU. antes del 1 de agosto. Unidos, los europeos constituimos el mayor bloque comercial del mundo. Usemos esa fortaleza para alcanzar un acuerdo justo", ha añadido.
Este mensaje de Sánchez llega también después de que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, haya dicho este sábado que Bruselas sigue dispuesta a continuar con las negociaciones arancelarias con Estados Unidos para lograr un acuerdo antes del 1 de agosto, aunque no descarta contramedidas "proporcionadas" para "salvaguardar" los intereses europeos.