Mar Vallés, directora comercial y de marketing de Stayingvalencia. Foto: EDUARDO MANZANAVALÈNCIA. Han pasado más de 20 años desde que la compañía de apartahoteles Valenciaflats comenzara a operar en la Capital del Turia. Desde entonces, no ha dejado de aumentar su negocio con la apertura de nuevos establecimientos, cada uno con un formato diferente y dirigido a distintos públicos. Un crecimiento que ha llevado a la firmar a ordenar su modelo y crear una nueva marca paraguas en València para aglutinar todos sus alojamientos: Stayingvalencia. Su objetivo es "dar al cliente una experiencia 360º" y ganar músculo en la ciudad. Pero también nace con la aspiración de mirar más allá de la plaza valenciana y dar el salto a nuevos mercados, aunque sin planes de expansión por el momento.
La nueva cadena surge con once establecimientos, tanto hoteles como apartahoteles, y los cinco restaurantes que implementan su oferta hotelera en la ciudad, de 520 habitaciones. Entre sus firmas están las ya conocidas: Ramirez, apartamentos Wallace o Parker The Urban Flats hasta hoteles singulares como Helen Berger, Lotelito, Cosmo o Malcom and Barret.
El nacimiento de esta nueva insignia hotelera en el cap i casal llevaba gestándose desde hace tres años ante su imparable crecimiento y la diversidad de sus alojamientos. "Empezamos como Valenciaflats, que fue la primera marca de apartamentos turísticos en València, pero hemos ido creciendo en productos hasta llegar al Hotel Helen Berger con cuatro estrellas. Por tanto, detectamos una necesidad de crear una marca paraguas que englobará a las diez submarcas que ya teníamos, pero siempre manteniendo la identidad y exclusividad de cada una de ellas", explica Mar Vallés, directora comercial y de marketing de Stayingvalencia.
De esta forma, la compañía se reinventa, aunque siendo fiel a su filosofía y manteniendo el estilo de cada uno de sus establecimientos. "Al final se trata de reforzar al grupo. Vimos que había deficiencias en cuanto a que Valenciaflats no representaba a otros de nuestro hoteles. Teníamos que desligarlos y la mejor forma fue crear una marca paraguas", destaca. Sin embargo, el nombre y la personalidad de cada alojamiento se va a mantener.
Su objetivo es dar al cliente "una experiencia 360º" y, para ello, en todos sus locales ofrecen un abanico de servicios, adelantándose a las necesidades de los clientes. "Por ejemplo, ahora está muy de moda el tema del yoga y estamos haciendo sinergias con 'yoguis' en València para ofrecer ese servicio también extra", señala Vallés. También buscan generar sinergias con gremios artesanos y firmas locales para enseñar València y que el turista "conozca las entrañas de la ciudad". "Buscamos sumar con empresas que aporten un valor añadido a la experiencia del viajero. De esta forma, desde cada hotel fomentamos que existan servicios acordes a cada público objetivo", puntualiza.
En un sector tan competitivo como el hotelero, Vallés remarca que su valor diferencial pasa por un equipo humano "muy comprometido con el proyecto" y con un fuerte liderazgo femenino. "El 68% de la plantilla en la empresa somos mujeres", ensalza. También pone en valor que cada uno de sus negocios tiene una identidad diferente. "Son alojamientos a medida, con identidades propias, consolidadas, muy marcadas y con mucho carácter. Ofrecemos una experiencia global porque queremos ser es el punto de encuentro para todo aquel que quiere visitar València y vivirla de forma única", afirma.
Y es que el perfil de su huésped es muy dispar y así seguirá siendo porque la nueva marca no va a cambiar la esencia de cada alojamiento. "Nuestro claim por excelencia con Stayingvalencia es ‘Come as you are’ porque, precisamente, tenemos productos muy distintos que dan cabida a un montón de públicos objetivos. Tenemos desde un perfil familiar, corporate, parejas o los nómadas digitales… Abarcamos todo tipo de segmentos y, en base a sus necesidades, cada cliente puede escoger un producto u otro", explica.
Por el momento, Stayingvalencia no tiene planes de expansión a la vista. El duro golpe de la pandemia y la paulatina reactivación del turismo les mantiene en una posición de espera de nuevas oportunidades. "Esperamos poder ir creciendo, aunque ahora mismo no tenemos planes de expansión. Estamos viendo a ver qué va a pasar con la recuperación del turismo. Una vez haya un poco de estabilidad, sí que nos gustaría crecer porque ese es también el objetivo. Vamos a ir tanteando el mercado", apunta.
De hecho, tampoco descarta en un futuro dar el salto fuera de la plaza hotelera valenciana. Aunque tampoco hay planes en marcha de momento. "Sí que es cierto que la marca es una identidad 100% València porque llevamos veinte años en la ciudad, pero sería interesante en algún momento dar el paso y probar en algún otro mercado. No lo descartamos", señala la directora de marketing de la marca.
Vallés recuerda que estos dos últimos años han sido muy duros para el sector y se han ido adaptando a marchas forzadas. Ahora ven la luz al final del túnel y "un futuro más esperanzador" tras el fin de la mayoría de las restricciones, lo que, a su vez, les ha permitido ir recuperando al turista. "Esperamos que este año sea el de la recuperación. Creo que lo vamos a notar a partir de Semana Santa", afirma. De hecho, para esas fechas el libro de reservas se mueve de forma positiva y cuentan ya con "porcentajes de ocupación elevados". Esperan, por tanto, que sea el pistoletazo de salida para el despertar del turismo tras la crisis sanitaria.
En su caso, su mercado emisor por excelencia está siendo el cliente holandés, francés y belga, mientras que el británico cada vez es más residual. También están detectando el resurgir del turista italiano, que tímidamente empieza a hacer reservas y visitar la ciudad. Por ello, esperan superar las cifras de 2021, un año con cifras mejores de las que habían previsto. "Es cierto que fue un ejercicio tambaleante porque hubieron épocas buenas y otras malas, pero creo que fue mejor de lo que esperábamos", destaca la directora comercial y de marketing de Stayingvalencia.
Por el momento, la guerra no está teniendo impacto en el negocio y no han detectado ralentización en las reservas ni cancelaciones. Lo que sí están sufriendo es la escalada de precios de la energía y más para un sector que utiliza permanentemente la luz para atender a sus clientes. Ante esta coyuntura, Stayingvalencia está estudiando la posibilidad de instalar placas solares en sus hoteles para adaptarse a la situación y minimizar el impacto.
De cara al cierre de este año, considera que será a partir de Semana Santa cuando se produzca un cambio en el turismo. "Somos optimistas y esperamos que 2022 sea el año de la recuperación. Ya hemos notado mejoría respecto a 2021 y esperamos cerrar el año con más facturación. Ahora que empieza el buen tiempo veremos cuál es la tendencia", concluye.
