ELCHE. Armando Lozano ya ve la luz al final del túnel.
Apenas cuatro meses después de ser intervenido de una rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco interno de su rodilla izquierda y pese a que se había fijado un plazo de recuperación mucho mayor, ya entrena con el resto de sus compañeros.
Este martes Armando apuntaba que si bien no se fija una fecha para su vuelta, las sensaciones son buenas y tiene ‘ganas e ilusión’ por regresar a los terrenos de juego, al tiempo que demostraba ser consciente de que le será difícil hacerse un hueco en el once inicial por la competencia existente para ocupar una de las dos plazas de central.
Respecto a la lesión y su decisión de esperar a que finalizara la temporada para pasar por el quirófano, el jugador justificaba su decisión en la ilusión que tenía por poder jugar el play off de ascenso a Primera División. Lo anterior reconocía que pudo ser contraproducente pero nadie le obligó a tomar esa decisión
Por lo que se refiere a la crisis de juego y resultados del equipo, Armando apostaba por ganar el sábado para salir de la dinámica negativa. Los franjiverdes se enfrentan al Nàstic que llega como colista al Martínez Valero tras sumar solo 5 de 24 puntos y no conocer aún la victoria. No obstante lo anterior, Armando abogaba por evitar confianzas ante un rival que está seguro que saldrá de ahí abajo.
