MADRID (EP). La agencia de calificación crediticia Moody's rebajó ayer el rating asignado a la compañía de alimentación Campofrío por considerar que su nivel de rentabilidad se sitúa por debajo de las expectativas.

La calificación e la empresa de alimentación ya se encontraba en el nivel de grado especulativo, comúnmente conocido como 'bono basura', pero con esta decisión Moody's rebaja la calificación en un peldaño, pasando de 'Ba3' (calidad cuestionable) a 'B1' (calidad pobre).

Moody's subraya que el incremento de los precios y la reducción de los gastos no son suficientes para compensar la desaceleración de la demanda de los consumidores, con la consiguiente presión sobre los costes.

La agencia de calificación recuerda que Campofrío se vio afectada de forma negativa por el aumento del precio del cerdo en los últimos dos años.

CERRARÁ TRES PLANTAS

Mientras tanto, ayer se conoció también que la cotizada cerrará este año tres plantas, aunque no ha detallado en qué países, al tiempo que pondrá en marcha una fábrica de pizzas en Olvega (Soria), que se inaugurará previsiblemente a finales de este ejercicio.

Desde la empresa han señalado a Europa Press que se trata de una "mera reordenación interna", con el objetivo de optimizar la producción y ser más eficientes, al tiempo que han declinado concretar en qué país se acometerán los cierres ni los trabajadores a los qué afectará la medida.

"Habrá traslados de producción y plantilla", han señalado las mismas fuentes, que recordaron que la compañía cuenta con más de 30 plantas en distintos países de Europa.

En una presentación remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la firma burgalesa menciona los tres cierres previstos para este año, así como las dos plantas que clausuró el pasado año, junto a tres centros de producción.