MADRID (EP). La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha lanzado una consulta pública sobre el beneficio que Renfe y Adif obtienen del alquiler de sus espacios al resto de operadores como Ouigo o Iryo en estaciones, talleres o terminales de mercancías, entre otras instalaciones.

La CNMC ya clarificó los criterios que utiliza para supervisar estos precios --una tarea que puede realizar tras recibir una denuncia--, que no pueden superar el coste de prestación que asumen las empresas propietarias más un beneficio razonable.

El documento que se somete a audiencia pública hasta el 10 de noviembre detalla los valores de cada uno de los parámetros que componen la fórmula de la referencia de beneficio razonable. Las observaciones que se presenten serán públicas, salvo que se indique lo contrario.

Competencia recuerda que estas instalaciones son esenciales para que los operadores, tanto de viajeros como de mercancías, puedan desarrollar con normalidad sus actividades, ya que supone el acceso a las estaciones para que los viajeros puedan embarcar o a los talleres para arreglar los trenes.

La ley actual exige un acceso no discriminatorio, transparencia en las condiciones de acceso y de prestación de los servicios y la orientación de los precios al coste de prestación más un beneficio razonable, en el caso de los servicios básicos, y también en el de los servicios complementarios y auxiliares, cuando solo hay un posible prestador.

En 2020, la CNMC ya obligó a Renfe a bajar los precios que cobra a la competencia, al considerar que sus tarifas por el alquiler de sus talleres de mantenimiento era muy superior al coste de capital, sobre todo porque muchos de los 20.000 activos con los que cuenta ya estarían amortizados.

No obstante, la empresa pública ha lanzado esta semana un plan de inversión de 1.000 millones de euros para construir nuevos talleres de mantenimiento de trenes y modernizar los ya existentes, por lo que todos esos activos tendrán mucho margen de amortización.