VALÈNCIA. El polígono industrial de El Bony, en Catarroja, sigue siendo un reflejo de la devastación causada por las inundaciones del pasado 29 de octubre. A pesar de los esfuerzos locales por sufragar los daños de la riada, la recuperación de este área industrial clave para la economía de la región parece todavía lejana. La alcaldesa del municipio, Lorena Silvent, denuncia a Valencia Plaza la "insuficiencia" de los recursos destinados a rehabilitar esta zona estratégica, que abarca un millón de metros cuadrados y es hogar de unas 450 empresas.
El impacto económico del polígono de El Bony en Catarroja y sus alrededores resulta innegable. Además de ser un núcleo logístico fundamental, genera miles de empleos directos e indirectos que no solo benefician a este municipio, sino también a localidades vecinas de l'Horta Sud como Albal, Beniparrell o Massanassa. De este modo, sectores clave como el transporte, la industria agroalimentaria, la logística y la manufactura dependen en gran medida de su operatividad. Sin embargo, tras la Dana, muchos de estos empleos están en riesgo, ya que varias empresas aún no han podido reanudar su actividad habitual.