VALÈNCIA. El Ayuntamiento de Alzira ha denunciado este lunes, en una rueda de prensa, el bloqueo del proyecto de la Casa Real del municipio. En dicha sesión, han comparecido el alcalde, Alfons Domínguez y el concejal de Hacienda, Contratación y Urbanismo, Andrés Gomis, que han sido acompañados por el arquitecto redactor del proyecto de ejecución, Rubén Bodewig (Escalar Estudio de Arquitectura) y José Luis Alapont, del Instituto de Restauración del Patrimonio de la Universitat Politècnica de València, uno de los autores del informe realizado sobre el proyecto.

Gomis ha detallado que "desde noviembre de 2024, que es cuando el Ayuntamiento recibe el proyecto de ejecución, se han tenido varias reuniones con los técnicos de la dirección general de Patrimonio para poder obtener la autorización. También se aportó un informe del Instituto de Restauración del Patrimonio de la Universitat Politècnica de València, para confirmar que el proyecto cumple los criterios indicados por la consellería y minimiza la afección al patrimonio. Con esto, no queda ninguna cuestión técnica pendiente porque el Ayuntamiento de Alzira ha cumplido escrupulosamente con sus obligaciones y con todas las indicaciones de la Consellería, con lealtad y colaboración. Incluso nos llegaron a decir, siempre de palabra, que el proyecto tenía ya los informes técnicos favorables y que solo faltaba la firma de la directora general. Pero la autorización, el día de hoy, no ha llegado".

Por su parte, Bodewig ha explicado el proceso para la redacción del proyecto y los criterios seguidos, y ha indicado que la redacción se adapta para que sea viable el mantenimiento de los restos arqueológicos. Ha continuado diciendo que "se han seguido todas las premisas indicadas desde la consellería. Incluso se han pedido cosas nuevas sobre cuestiones ya autorizadas por consellería. Una vez incorporadas al proyecto, nos encontramos con el silencio. Explican que los criterios nuevos se cumplen pero no lo llega a firmar nadie. No tengo palabras para explicarlo".

En la misma línea, Alapont ha señalado que "recibimos la última versión del proyecto de ejecución hacia el mes de julio para hacer el informe que valorara las tres cuestiones sobre afecciones patrimoniales. La conclusión es que las modificaciones planteadas en el proyecto de ejecución suponen una mejora respecto al proyecto básico que fue autorizado por la Consellería de Cultura en el 2023". De esta forma, la UPV informa favorablemente el proyecto presentado. 

El alcalde, Alfons Domínguez, ha indicado que se ha pedido una reunión con el consejero de Educación, Cultura, Universidades y Ocupación, José Antonio Rovira, para valorar el que está pasando porque: "El Ayuntamiento de Alzira ha cumplido todos y cada uno de los pasos administrativos y técnicos que nos exigían, adecuando el proyecto a todo el que nos han dicho. No volamos tratos de favor. Pedimos que no nos pongan trabas que nos impiden trabajar por nuestro patrimonio y que se haga posible este proyecto. No nos resignamos, pero cada vez lo tenemos más difícil. Los plazos son los que son y se acaba el tiempo para tener la solución".

Por último, Domínguez ha puesto de manifiesto que "quién puede perder la inversión de 2,3 millones de euros no es el equipo de gobierno actual. La perdería Alzira, la Comunidad Valenciana y la figura del rey Jaume, en el 750 cumpleaños de su muerte".

Antecedentes del proyecto

El proyecto de la Casa Real de Alzira cuenta con un presupuesto de más de 2,3 millones de euros del Ministerio de Industria y Turismo, financiados con fondos europeos Next Generation, en el marco del Plan Turístico Nacional Xacobeo 2021-2022, del cual la Comunitat Valenciana obtuvo 2,7 millones para actuaciones en patrimonio histórico. Las dos intervenciones están en Alzira: la rehabilitación de la Muralla islámica y la Casa Real. La Generalitat Valenciana es beneficiaria de esta subvención, que es la que recibe los fondos del Ministerio, pero lo transfiere en el Ayuntamiento de Alzira porque ejecuta el proyecto. Al actuar sobre Bienes de Interés Cultural, el consistorio requiere la autorización de la Conselleria de Cultura.