VALÈNCIA. El gobierno municipal de Favara atraviesa su momento más delicado desde que el Partido Popular asumiera la alcaldía en abril de 2024. Dos de los cuatro concejales populares que integran el ejecutivo local, Ester Císcar y Rafael Jaijo, han presentado su renuncia, una decisión que, por ahora, reduce al equipo de gobierno a la alcaldesa, María Pilar Sala Fayos, y una concejala, Amparo Fayos. Estas dimisiones ahondan en la fragilidad de una corporación marcada por la falta de mayorías. 

Las dimisiones fueron comunicadas en la Comisión Informativa General celebrada este martes por la tarde, si bien todavía no se ha concretado qué ediles asumirán sus responsabilidades ni cómo se reorganizará el equipo de gobierno ya que la alcaldesa ha optado por no hacer declaraciones. Ambos concejales han alegado motivos personales para dejar el cargo. 

El Partido Popular estaba en minoría con cuatro concejales en un pleno compuesto por once ediles. Frente a ellos, la oposición suma una mayoría absoluta de siete representantes, repartidos entre el PSPV-PSOE (tres), Compromís (dos) y otros dos concejales no adscritos que fueron expulsados de Compromís. Esta correlación de fuerzas ha dificultado de forma constante la aprobación de las principales iniciativas del ejecutivo local. Desde la llegada del PP a la alcaldía, buena parte de las propuestas elevadas al pleno han sido rechazadas por la oposición.

La crisis interna de Compromís, el partido más votado

Esta legislatura ya viene marcada por la polémica en el Ayuntamiento de Favara. En abril de 2024, cuando todavía no había cumplido un año la legislatura, las retribuciones al equipo de gobierno provocaron la crisis internade definitiva de Compromís, que desembocó en la dimisión del entonces alcalde, José Francisco Vicedo. Dos concejales de esta formación votaron en contra de los sueldos, fueron expulsados y pasaron al grupo de no adscritos, lo que precipitó la salida de Vicedo y el posterior acceso del PP al gobierno municipal.

La doble renuncia abre ahora un escenario de incertidumbre sobre la estabilidad del gobierno municipal y la continuidad de la actual hoja de ruta política. Mientras tanto, el PSPV ya manifestó el pasado mes de mayo su disposición a promover una moción de censura al considerar “inoperante” el gobierno en minoría del PP, aunque para ello necesitaría sumar al menos seis concejales, un respaldo que, por el momento, no está garantizado. En caso contrario, el portavoz de los socialistas asumiría la vara de mando con el apoyo de sus dos concejales, los dos valencianistas y los dos ex de Compromís, dejando de nuevo al PP en la oposición.