VALÈNCIA. La indignación y desesperación de los empresarios afectados por la Dana crece a diario debido a la gestión del Consorcio de Compensación de Seguros. Casi cinco meses después de la riada que afectó la provincia del Valencia, muchos empresarios esperan todavía la indemnización completa del Consorcio.
La frustración es un sentimiento común entre los empresarios afectados. Los testimonios recogidos por este diario centran sus críticas en tres aspectos principales: la lentitud en la gestión, pagos o anticipos "injustos" y la falta de información. Sobre estos tres bloques se sustentan las denuncias de quienes consideran desesperante la situación.
Ante este clima de indignación, el presidente del Consorico de Seguros, José Antonio Fernández de Pinto, explicó en una visita a València que la tramitación y valoración de siniestros en industrias y comercios es más compleja que en otros sectores. En ese sentido, aseguró que gran parte del dinero que el Consorcio tiene estimado invertir irá dirigido al tejido empresarial de la provincia de Valencia.
Según informó el Consorcio en la última actualización de indemnizaciones, se han invertido 623 millones de euros en comercio e industria. Actualmente, las últimas cifras señalan que los comercios y almacenes han recibido 8.400 pagos por 373 millones de euros, mientras que en siniestros a nivel industrial se han hecho 2.375 pagos por un valor de 250 millones de euros.
Sin embargo, el presidente de la Federación de Parques Empresariales de la Comunitat Valenciana (Fepeval), Diego Romà, reconoce que desde la organización no disponen de cifras concretas sobre los pagos. "No tenemos datos concretos sobre la situación exacta de los expedientes de tramitación de las indemnizaciones del Consorcio de Compensación de Seguros, pero la percepción general entre las empresas de los parques empresariales es que sigue habiendo bastante retraso en la peritación, pago de las indemnizaciones, etc.", explica. Actualmente, los datos facilitados por el Consorcio son generales y no detallan si los importes corresponden a anticipos ni qué cantidades exactas se han abonado.
Desde World Claim, empresa experta en seguros y en guiar a los asegurados, afirman que de esa cantidad que el Consorcio dice haber abonado, es importante saber si se ha resuelto escrupulosamente en función del daño real y de lo que dice la póliza, que según explican, es el documento que lo rige todo. Es decir, es necesario saber si esos pagos se han ajustado a la realidad de cada póliza.

- Almacén afectado por la Dana.
- Foto: CARLOS LUJÁN/EP.
"No es una ayuda, es un dinero que me pertenece"
Lola Pitarch, gerente de un almacén de ventilación industrial en el polígono de La Estació de Paiporta, ha compartido con Valencia Plaza su situación tras la Dana y su percepción sobre la gestión del Consorcio como empresaria afectada. "Nosotros hemos reconstruido toda la empresa, somos un almacén y hemos tenido que comprar de nuevo todo el material que teníamos en stock, pero no hemos podido llegar al número que teníamos el 29 de octubre", explica. "Podemos hacer un esfuerzo, y de hecho lo estamos haciendo, pero va a llegar un momento que no vamos a poder más".
Esta empresa logró reabrir el 16 de diciembre gracias a una inversión propia en la reconstrucción. Sin embargo, su propietaria cuenta que el perito asignado ni siquiera llegó a inspeccionar el interior de la nave. “Se quedó en el umbral de la puerta y declaró siniestro total”, relata. En esta nave se estimaron unos daños de entre 220.000 y 230.000 euros, pero hasta la fecha solo ha recibido un anticipo de 50.000 euros. Todo ello, a pesar de haber iniciado el expediente el 1 de noviembre, apenas tres días después de la Dana.
El polígono de la Estació de Paiporta, donde está situada la empresa de Lola, es uno de los más afectados por la Dana. Desde la Asociación de Polígonos Industriales de Paiporta (Apip) llevan tiempo reclamando actuaciones en esta área empresarial. "Me despierto todos los días con la fotografía del barro en la nave y con la dejadez que tiene la administración, me siento abandonada", cuenta Lola Pitarch, y añade: "Salgo de la nave y tengo un solar lleno de barro como si lo hubieran bombardeado, con casas al lado sin paredes, solo veo destrucción".

- Poligono de La Pahilla de Chiva tras la Dana.
- Foto: CARLOS LUJÁN/EP.
"No peleé la cantidad que me ofreció el Consorcio porque me hacía muchísima falta"
Muchos empresarios también denuncian que el consorcio está realizando pagos por debajo de la cifra real de daños en comercios y naves industriales. Este es el caso de Nany, gerente de la tienda Nany & Vany: "No peleé la cantidad que me ofreció el consorcio porque me hacía muchísima falta y me urgía un montón", cuenta esta empresaria.
La cantidad que Nany ha recibido está muy por debajo de su propia valoración. Su lista de daños ascendía a 161.000 euros, pero el Consorcio le ha comunicado que tiene un infraseguro —un término que ella desconoce y no le han explicado— y que la cifra final se reduce a 123.000 euros. La tienda de Nany & Vany está un edficio histórico, por lo que su situación se complica al tener que pagar más impuestos, "Si yo tengo que hacerme cargo solo de la fachada, al ser patrimonio, no puedo afrontarlo", relata Nany, "solo las puertas valencianas ya cuestan 22.000 euros. O me llega para la fachada y la casa o me llega solo para mi negocio". Actualmente está también a la espera de una ayuda del ministerio del Interior por la condición que tiene el edificio.
Casos como el de Nany son muy repetidos, en los que el Consorcio paga por debajo de lo que el asegurado exige. Ante estos casos, la empresa World Claim cuenta a este diario que esta es una escena que se repite: "No justifican a qué obedece el pago, es decir, cuál es la valoración de daños y su desglose", explican. Además matizan que es labor del perito del propio Consorcio, y explican que es quien debe justificar el importe ingresado al asegurado.

- Fachada histórica de Nany & Vany
Nany cobró el martes la indemnización del Consorcio, "me ha costado lo mío cobrar y pelear para que me paguen, he tenido que ir en tres ocasiones al Consorcio y en el último momento dije que no me movía de ahí hasta que no me atendiera un superivisor". A lo que Nany añade: "Yo lo aprobé pensando que iba a cobrar como a mi me dijo el périto, en diciembre, y lo he cobrado a fecha de hoy" y según cuenta, generando las deudas que conlleva pagar casi cinco meses de pagos e impuestos sin facturar nada.
En otras empresas, como Kaldevi en Paiporta están todavía en trámites con el Consorcio. José Antonio Gómez, propietario de esta empresa, cuenta que fue el pasado jueves cuando les visitó el perito para cifrar los daños: "Nos dijeron que la solución como muy pronto podría darse en dos semanas, o sea que fijémonos a cuantos meses vista se plantea esta situación".
La labor del perito de parte
Ante la incertidumbre y los retrasos en la gestión del Consorcio de Compensación de Seguros, muchos empresarios han optado por contratar peritos de parte. Su labor consiste en asesorar a los asegurados en la preparación de sus reclamaciones y defender sus intereses frente a la valoración del Consorcio.
Una de estas empresas es la ya mencionada World Claim, especializada en peritaje tras catástrofes naturales como la Dana, el terremoto de Lorca o la erupción del volcán de La Palma. Desde la compañía se autodenominan los 'Robin Hood' de los seguros. Su labor consiste en realizar un peritaje exhaustivo de los daños y analizar en detalle la póliza del asegurado para reclamar la indemnización que le corresponde. Una vez revaluados los desperfectos, elaboran un informe que remiten al perito del Consorcio con el objetivo de garantizar un pago acorde a lo estipulado en la póliza.
Desde World Claim, cuentan: "Hay que recordar que le corresponde al asegurado, entregar al perito del consorcio su informe de daños e incumbe al perito, revisar ese informe y decir en qué está de acuerdo y en qué no, y si no está de acuerdo, porqué. En daños de esta magnitud no se puede ni se debe permitir hacer videoperitaciones, ni ignorar la necesidad de respuesta efectiva y justa, que esperan los asegurados, muchos de los cuales conforman el cinturón industrial valenciano”.
Mientras algunos han logrado reabrir con financiación propia, otros continúan esperando respuestas en un proceso que consideran lento y opaco. Ante esta situación, la contratación de peritos de parte se ha convertido en una vía para reclamar pagos más justos, mientras la incertidumbre y la presión económica siguen asfixiando a los afectados.