VALÈNCIA. Desde la Agencia Española de Meteorología (Aemet) hasta el servicio de emergencias de la Generalitat, el 112 o la comunicación de los ayuntamientos. Estas fueron las fuentes de información que sirvieron durante la Dana y el día anterior para que la Universitat de València (UV) tomara la decisión de cancelar las clases y evitar los desplazamientos de alumnos y profesores. De hecho, ya desde el día 28 de octubre, un día antes de la catástrofe, empezó a valorar la declaración de la emergencia, tal como consta en el informe enviado por la institución universitaria a la jueza instructora de la Dana y al que ha tenido acceso Valencia Plaza.

El informe, firmado por el coordinador del Comité de Emergencias de la Universitat de Valéncia, Vicerrector de Economia e Infraestructuras, Justo Herrera Gómez, responde al requerimiento de la jueza encargada de la causa penal que sigue el juzgado de Instrucción 3 de Catarroja. En el documento, la universidad hace un relato de cómo se fueron tomando las decisiones en el comité de emergencias interno y por la rectora, Mavi Mestre, a quien atribuye precisamente la "decisión final de declarar los respectivos niveles de emergencias". El día 28 a las 21h se declaró el nivel de emergencia 2, suspendiendo la acitividad docente, y el día 29 a las 11.35h se extendió esta suspensión al resto de actividades universitarias (administrativas, investigadoras y culturales).

El comité de emergencias de la UV, señala el informe, está formado por representantes del equipo de gobierno, de centros y de servicios, "que participan en él por su responsabilidad y conocimiento de las áreas funcionales importantes para la implementación de las medidas que se deban tomar". "La información que se maneja es la información pública que generan las instituciones competentes en las materias objeto de la emergencia, más información interna", señala el organismo, que deja claro que "No contaba con más información de la que podría tener cualquier institución que estuviera al tanto de los avisos e informaciones de los organismos públicos." Aemet y S-EM (Emergencias) de la Generalitat Valenciana". Así, dice que tomó "sus decisiones después de analizar eses informaciones".

El comité activado desde el día 28 de octubre

En el relato cronológico, señala que el lunes 28 de octubre se activó a las 10.25h el comité de emergencias de la UV después de haber consultado "desde primeras horas de la mañana las previsiones, incluso del día anterior 27 de octubre, de la Aemet y del servicio de emergencias de la Generalitat Valenciana (S+EM GVA) que alertaban de precipitaciones intensas para los días martes y miércoles". A partir de aquí, señala, sus componentes se mantuvieron "atentos a la evolución de la situación meteorológica para compartir la información que se genere al respecto y valorar la procedencia de activar, en su caso, algún niveI de emergencia".

De hecho, a las 11.28h, el comité ya valora la propuesta de declarar el nivel 1 de emergencia "para evitar desplazamientos y uso de los servicios de transportes, ante las previsiones que se habían hecho ya públicas por la Aemet y el servicio de emergencias de la CV de precipitaciones intensas, extensas y generalizadas, sobre todo a partir del martes y el miércoles". El nivel 1 lleva aparejada la posibilidad de emitir recomendaciones al profesorado de no realizar exámenes, prácticas obligatorias, entrega de trabajos, o ejercicios de evaluación, de forma que la asistencia a clase del estudiantado sea "potestativa, sin sufrir perjuicios en la evaluación de su rendimiento académico".

Ya a las 13.23h del día 28 se empezó a "valorar la declaración del nivel 2 de emergencia" en la UV toda vez la cuenta de X del servicio de Emergencias de la Generalitat había publicado un aviso especial en el que informaba de un episodio de "lluvias, viento y fenómenos costeros" y recomendaba retirar vehículos de zonas inundables y alejarse de las veras de ríos y barrancos. La zona de Ontinyent, donde se encuentra uno de los campus universitarios, estaba en situación de riesgo naranja. El nivel 2 de emergencia supone suspender la actividad docente y empezar a considerar el cierre de aparcamientos y la paralización de toda actividad.

Ya por la tarde, a las 19.28h, la web del Ayuntamiento de Sagunto informó de la suspensiónd e las clases y la Aemet activaba la alerta naranja para toda la provincia por lluvias torrenciales e incluso granizo, por lo que ya el Comité de Emergencia propuso establecer el nivel 2 de emergencia, que declaró la rectora, Mavi Mestre. A partir de aquí, se inició "el proceso de información a la comunidad universitaria, tanto a los diferentes coordinadores de la representación de estudiantes, como a los decanos de Facultades y directores de Escuelas, a través de los medios sociales y web, e informando a los medios de comunicación".

Día 29: suspensión total a las 11.35h

Al día siguiente, ya el día de la catástrofe, desde primera hora de la mañana el comité de emergencias de la UV estuvo recibiendo información sobre el estado de los diferentes campus, entre otras cosas. Y fue a las 10.30h cuando "se comparte información sobre las páginas web de Aemet y de 112 GVA, en las que se acababa de pasar a nivel rojo prócticamente a toda la provincia de Valencia". Esto llevó a que casi una hora después, a las 11.19h el Comité decidiera proponera a la rectora elevar el nivel de emergencia al 3, el máximo. Mestre acordó esta medida a las 11.35h y se puso en marcha, de nuevo, la maquinaria informativa para suspender toda actividad universitaria presencial "con la excepción de las tareas de apoyo a las funciones básicas y de mantenimiento de instalaciones criticas".

Cabe recordar que la jueza ha tomado la manera de proceder de la UV como una prueba de que sí se podían adoptar medidas precautorias con la información que se tenía. En uno de sus autos, la instructora, a la hora de referirse a "la posibilidad de tomar decisiones preventivas en relación con la Dana", apuntó que "la Universitat de València acordó acertadamente la suspensión de las clases". De ahí que solicitara a la institución universitaria información sobre "qué órgano tomó la decisión, en qué información se sustentó y si contó con algún técnico" a la hora de adoptarla. La Universitat de València responde ahora que no contaba con más información que la información que era pública y notoria para todos los organismos.