VALÈNCIA. Carlos Mazón ha comunicado a la presidenta de Les Corts Valencianes, Llanos Massó, su renuncia al cargo de president de la Generalitat Valenciana. Así consta en un escrito remitido al Parlamento autonómico a las 15.24h de este lunes, en torno a seis horas después de la declaración institucional en la que ha anunciado su dimisión como jefe del Consell. 

De esta manera, Les Corts toman razón de la decisión adoptada por el president e inician la cuenta atrás para la elección de un diputado o diputada que suceda a Mazón al frente del Gobierno valenciano; en caso contrario, el Parlamento autonómico se disolvería y se convocarían unas elecciones autonómicas. Todo ello en un proceso que podría alargarse varios meses.

En este sentido, Mazón seguirá como president en funciones hasta que se publique en el BOE la designación de un nuevo president. "Tanto el president como el Consell siguen ejerciendo su actividad en funciones", remarcaban durante la mañana de este lunes fuentes de la Generalitat Valenciana. Una vez presentada la renuncia ante el Parlamento autonómico se ha activado de manera automática un plazo de 12 días hábiles para que los grupos de Les Corts puedan presentar candidaturas para la Presidencia de la Generalitat.

Tras ello, se abrirá un plazo de 3 a 7 días para fijar la celebración del pleno de investidura del nuevo president. Si transcurrido el plazo de dos meses desde la primera votación de investidura, o en el caso de que no hubiese un candidato a la Presidencia en el plazo legal establecido, se disolverán les Corts y habría elecciones autonómicas. 

Es por ello que, tal y como ha apuntado el propio Mazón, ahora es turno para que la mayoría parlamentaria que suman PP y Vox en la Cámara autonómica lleguen a un acuerdo para la designación de un nuevo líder de la Generalitat Valenciana. Según los plazos marcados por la ley, el primer pleno de investidura debería celebrarse durante la última semana de noviembre. Si ambas formaciones no alcanzan un pacto sobre la figura que debe sustituir a Mazón, se convocarían unas elecciones autonómicas, que podrían celebrarse a finales del primer trimestre del próximo año, según los plazos marcados por la ley.