VALÈNCIA. Dentro de las idas y venidas entre el Gobierno de España presidido por Pedro Sánchez y sus socios circunstanciales en el Congreso, como por ejemplo Junts, vienen produciéndose todo tipo de episodios, tal y como ha podido comprobarse con el decreto ómnibus de las pensiones en los últimos días. Negociaciones, exigencias, declaraciones altisonantes, revuelo mediático y concesiones son parte del menú que viene sirviéndose en la agenda mediática diaria a lo largo de la presente legislatura.
Este martes, la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, anunció precisamente que parte del acuerdo alcanzado en relación al decreto ómnibus incluía también el pacto de que La 2 de TVE en Catalunya emita íntegramente en catalán en el plazo de dos años, además de exigir mayor cantidad de recursos con este objetivo.
"Hemos cerrado un acuerdo con Televisión Española y el nuevo presidente para que el 20% de los recursos que tiene Televisión Española, que es el PIB que generamos los catalanes, se repercuta en Catalunya. Y, por tanto, que se hable catalán. Y que en Catalunya La 2 sea en catalán", sentenció la diputada en una entrevista en Catalunya Ràdio. En esta línea, Nogueras situó las emisiones íntegras en catalán en un plazo máximo de "un par de años": "Poco a poco se irá haciendo, pero el objetivo es este. Oferta en castellano tenemos muchísima. En catalán, no. Y vale la pena que los votos de Junts sirvan también para esto", comentó.
Un discurso que corroboró poco después el conseller de la Presidencia de la Generalitat, Albert Dalmau, al anunciar que el Govern reordenará el espacio audiovisual en Cataluña para que TV3 emita en ultra alta definición y trabajará además para que La 2 emita en catalán de forma íntegra. "Para proteger nuestra lengua, el catalán, para defenderla, para que exista un buen uso social del catalán y para promoverlo, necesitamos que haya buenos contenidos audiovisuales en catalán. Es fundamental que promovamos nuestra industria audiovisual, pero que además lo hagamos promoviendo nuestra lengua, nuestra cultura", subrayó el conseller socialista.
Sobre esta última cuestión, desde el Govern señalaron que La 2 ofrecerá sólo contenidos propios en catalán y producidos en Cataluña que permitirán "avanzar en la consolidación de los estudios de Sant Cugat (RTVE) como un nuevo hub audiovisual", recalcó Dalmau.
- Puig y Pérez Tornero. -
- Foto: GVA
Una hoja de ruta facilitada por el Gobierno de España para con RTVE en Cataluña que contrasta con lo ocurrido en la Comunitat Valenciana. Hace más de dos años y medio, concretamente el 7 de julio de 2022, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, se reunía con el entonces presidente de Radiotelevisión Española (RTVE), José Manuel Pérez Tornero, para firmar un protocolo de intenciones con el objetivo de ampliar los servicios y las prestaciones del centro territorial del ente público. Una cita en la que el jefe del Consell aprovechaba para anunciar la adquisición de la antigua Facultad de Magisterio, propiedad de la Universitat de València, que serviría para albergar la nueva sede del centro territorial de RTVE, pero también la Escuela Valenciana de Administración Pública (EVAP).
Una operación ambicioso que, con el cambio de gobierno tras las elecciones autonómicas de 2023, fue a parar directamente a un cajón. Pese a la renuncia de Pérez Tornero a la presidencia de RTVE en septiembre de 2022, lo que provocó cierta incertidumbre sobre la iniciativa, posteriormente sí se produjeron distintos pasos en la dirección deseada para aterrizar el proyecto. Se realizaron las gestiones en el Ayuntamiento de València para el cambio de uso del suelo y desde RTVE se incluyeron en los presupuestos de 2023 casi 8 millones de euros en partidas plurianuales repartidas entre 2024 y 2025 con el objetivo de unificar los centros territoriales (un plan iniciado en 2012), que se repartirían en 4,7 millones y 3 millones de euros por ejercicio respectivamente.
- Facultad de Magisterio donde se habría instalado RTVE. -
- Foto: KIKE TABERNER
Sin embargo, con la llegada de Carlos Mazón como presidente de la Generalitat, la idea pergeñada por Puig y su equipo perdió fuelle para los nuevos gobernantes. En su momento, las fuentes del Gobierno valenciano consultadas por este diario aseguraron que fue la sustituta de Pérez Tornero, Elena Sánchez, la que no quiso hacerse cargo del protocolo acordado, si bien también admitían la incomodidad de tener que asumir obligatoriamente el proyecto heredado del anterior jefe del Consell. De esta manera, y sin que tampoco desde la sede central de RTVE en Madrid se mostrase interés en aterrizar el plan, el ambicioso proyecto pasó a engrosar la lista de compromisos perdidos -o al menos en el limbo- tras un cambio de gobierno.
Una situación que contrasta con el anuncio del acuerdo de Gobierno con Junts para impulsar los contenidos propios en catalán y producidos en Cataluña que apuntan, según la propia Generalitat, a impulsar con el apoyo de inversiones estatales que los estudios de Sant Cugat se conviertan en un nuevo hub audiovisual, mientras el proyecto ideado en Valencia seguirá durmiendo el sueño de los justos.
