VALENCIA. La recién constituida Plataforma de afectados del Banco de Valencia, promovida por pequeños accionistas del banco, ha recurrido oficialmente ante el FROB las actuaciones que este órgano ha permitido a sus administradores provisionales y que van en detrimento de los accionistas, de los empleados, de la entidad y de la propia región económica donde la entidad tiene su arraigo, la Comunidad Valenciana. 

La plataforma ha formulado un recurso de reposición contra la venta de las acciones y el proceso que la misma ha seguido que,, en palabras de su recientemente nombrado portavoz, Javier Martí Herraiz, "supone una flagrante ilegalidad, al incumplir la propia normativa del FROB y carecer de la debida transparencia con el solo objeto de arruinar a los accionistas en beneficio de Caixabank, que ha comprado por un euro el Banco de Valencia y percibirá un crédito de entre 4.500 y 6.500 millones de euros, sin tener que pedir ella el rescate pues recibe esta cuantiosa ayuda de forma encubierta".

La plataforma ha instado al FROB la paralización cautelar de la venta hasta que sean resueltos sus recursos por ella interpuestos y que denuncian la nulidad de la venta por prescindir del procedimiento legal regulado en la ley creadora del FROB, acusando la falta de transparencia debida del Concurso de Venta y de las valoraciones de las que se sirvieron en el mismo.

La plataforma ha pedido al FROB que le faciliten el nombre y dependencia del personal del Fondo interviniente en el expediente de venta, para derivar contra ellos y contra los administradores provisionales del Banco nombrados por el FROB, la responsabilidad patrimonial de las que serán responsables por la denunciadas malas practicas, por las que la Plataforma está ultimando acciones penales contra los referidos Administradores provisionales.