VALENCIA PLAZA. Bancaja cerró ayer la colocación de una emisión de cédulas hipotecarias por un importe de 750 millones de euros. Según informa la caja valenciana, se trata de la primera emisión de la entidad sin aval del Estado desde mayo de 2008, que ha contado con una buena acogida en los mercados de capitales al recibir órdenes por encima de los 900 millones de euros, procedentes de 60 inversores institucionales. Las entidades coordinadoras fueron Barclays Capital, Citi, Deutsche Bank, DZ Bank y JP Morgan.

Esta emisión, cuyo plazo de amortización es de tres años, presenta un diferencial de 120 puntos básicos (p.b.) sobre el ‘midswap’, el índice de referencia para las emisiones a tipo fijo. Es decir, un precio inferior al de las emisiones realizadas con el aval del Estado. Con esta emisión de cédulas hipotecarias, Bancaja diversifica y refuerza más su estructura de financiación.

UNA EMISIÓN COSTOSA

El precio pagado por Bancaja supone el más elevado de las últimas emisiones de cédulas hipotecarias en España celebradas en los últimos quince días, además todas ellas por valor de mil millones de euros. Así, Banco Santander desembolsó 75 p.b. sobre el ‘midswap’ a siete años; Bankinter pagó 85 p.b. a tres años; La Caixa 90 p.b. a 6 años; mientras que el Banco Popular desembolsó 115 p.b. a 8 años.

Además, prácticamente a la misma hora que Bancaja colocaba su emisión de cédulas hipotecarias, el Banco Santander Totta de Portugal hacía lo propio con una emisión muy parecida a la de la caja valenciana, pero con un resultado bien distinto: 85 p.b. a 3 años.

Las cédulas hipotecarias son activos financieros o títulos de renta fija que se emiten con la garantía de la cartera de préstamos hipotecarios de la entidad de crédito emisora, tal y como lo define el propio Banco de España.