VALENCIA. "Hoy será el último día de trabajo para unos 220 trabajadores de Bankia que en su día solicitaron acogerse al programa de bajas voluntarias, pero que por circunstancias no fue posible y ha sido ahora cuando la entidad les ha abierto una ventana de propuesta de adhesión voluntaria para que lo hagan".

Así lo confirmaron ayer por la tarde a este diario fuentes próximas a la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri, que recuerdan que "con estas bajas prácticamente se completa el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) exigido por Bruselas para liberar la ayuda a la entidad y que se concretó en 4.500 empleados".

Un número al que hay que sumar las 1.500 salidas para totalizar las 6.000 exigidas por la Comisión Europea en tres años. Esas 1.500 personas están saliendo mediante la venta de participadas y procesos de externalización de servicios.

Tras estas salidas para finalizar completamente el ERE aún restarán algunos flecos, "básicamente personas que han solicitado su baja pero que por cuestiones de procesos de trabajo no causarán baja hoy sino que lo harán próximamente", según comentaron las mismas fuentes a Valencia Plaza.

En todo caso, el número es muy reducido en comparación con el volumen que finaliza su trabajo ahora y que básicamente se focalizan en los servicios centrales. Además, "a todas ellas la entidad ya les ha comunicado que ha aceptado su solicitud y que dejarán de trabajar en Bankia", advierten.

MADRID Y VALENCIA COPAN LAS SOLICITUDES

Madrid lleva la voz cantante de estas solicitudes de baja indemnizada denegadas en su día, dado que el número de personas afectadas ronda las 160, mientras que en Valencia alcanza el medio centenar y el resto se reparte entre Castellón, Alicante y Baleares.

Bankia puso en marcha este programa de bajas voluntarias -incluyendo también prejubilaciones- entre enero y febrero del pasado año, que contemplaba una indemnización de 30 días de salario por año trabajado con un tope de 20 mensualidades más un complemento ligado a la antigüedad, acordado entre los sindicatos y la entidad.

Al cierre de 2013, Bankia ya había completado prácticamente el 90% del ajuste de plantilla previsto con la marcha de unos 5.400 empleados; mientras que la cifra se fue completando con el paso de los meses hasta ahora donde Madrid y la Comunitat Valenciana llevaron el peso de los despidos. Algo lógico, por otra parte, dado que aglutinan casi dos tercios del negocio de Bankia.

De este modo, Goirigolzarri finaliza con año y medio de antelación el proceso de reestructuración al que se comprometió con Bruselas. Todo ello tras evitar el despido de unos 1.300 empleados tras las externalizaciones y ventas de negocios acometidas en los últimos meses.