VALENCIA PLAZA. Ni que decir tiene que el beneficio aportado por la CAM (203,4 millones al cierre de 2009) supera a sus tres ‘hermanas' (mejor dicho cuatro teniendo en cuenta Caja Castilla La Mancha). Los 203,4 millones de euros de beneficio consolidado se sitúan muy lejos de los 165,7 millones que presentó CajAstur -sin contar el lastre de CCM-, los 45,38 millones de Caja Cantabria y los 42,72 millones de Caja Extremadura.
Pero, sin duda, donde la CAM va a sacar más 'beneficio' de la ‘fusión fría' es en la mejora de los recursos propios, uno de sus principales talones de Aquiles. Las aportaciones de CajAstur, con un core capital que quita el hipo del 12,7%, de Caja Extremadura, del 9,08%, superan ampliamente el que tenía la CAM al cierre del pasado 31 de diciembre, del 6,5%.
También la mora -y por consiguiente la cobertura-, otro de los quebraderos de cabeza de la caja alicantina, va a verse beneficiada por el SIP, puesto que al término del pasado año sólo Caja Cantabria superaba la tasa de morosidad de la CAM, con un ratio del 5,13% frente al 4,53% de aquella. Obviamente sin tener en cuenta los números de Caja Castilla La Mancha (CCM).
Además, el nuevo SIP que va a ver el sistema financiero español va a traer consigo un fortalecimiento en lo que al patrimonio de fondos de inversión se refiere. El cómputo de las cuatro entidades en cuestión -sin contar los datos de CCM- va suponer un patrimonio de 2.322 millones de euros, según los datos de Inverco correspondientes al pasado 30 de abril. De este modo, la nueva ‘gestora' entraría entre las quince primeras de España, mientras tendría bajo sus filas a cerca de sesenta fondos.
