VALENCIA. Un mes ha tardado la nueva Apple Store de Valencia en hacer sentir su presencia en la ciudad. Esta semana su hasta ahora distribuidor autorizado Illa Digital -en la terminología de la multinacional un ‘premium reseller'- ha echado el cierre ante la imposibilidad de seguir compitiendo con el espacio propio de la compañía de la manzana abierto en el corazón comercial de la capital.
Illa Digital llevaba abierta unos cuatro años y fue una iniciativa de cuatro empresarios valencianos no vinculados al mundo de la informática que lograron poner en marcha en la calle Russafa (esquina con Cirilo Amorós) de la capital un punto de venta oficial de Apple, más allá de los corners de El Corte Inglés y de K-Tuin. Illa Digital fue y ha sido el primer y único Apple Premium Reseler (franquicia directa) en Valencia de la empresa que fundó Steve Jobs.
Pese a que durante ese tiempo la tienda funcionó con éxito, la apertura a primeros del pasado mes de diciembre de la Apple Store, gestionada directamente por la multinacional, ha sido un golpe demasiado duro para las ventas de la franquiciada.
Los propietarios de Illa Digital comunicaron a sus cuatro empleados que cerraban sus puertas esta misma semana ante la caída de ventas y la imposibilidad de competir con la Apple Store. De momento, K-Tuin, en este caso una cadena con varias tiendas en España, mantiene su centro de Campanar. La lejanía del centro de la ciudad, donde la Apple Store domina el mercado, puede acabar siendo una ventaja para su supervivencia.