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El desvío de medios para la reconstrucción retrasa proyectos de vivienda y encarece los materiales

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VALÈNCIA. Desde hace meses, la maquinaria y los profesionales del sector de la construcción trabajan a destajo en las labores de reconstrucción tras la descomunal Dana, que asoló la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre. Los destrozos y la devastación son de tal magnitud que ha sido mayúsculo el despliegue de recursos y profesionales que se han desplazado a las zonas afectadas ante la ingente cantidad de obras necesarias para restablecer la normalidad. Muchas compañías desviaron todos sus medios a estas tareas y, aunque poco a poco han tenido que recuperarlos para cumplir con otros compromisos adquiridos en otras actuaciones, la mayor parte de los activos sigue activa en estos puntos.

Una situación que está teniendo sus primeros efectos: la ralentización en la ejecución de otros proyectos como promociones de viviendas. Según explican a este diario desde el sector promotor, actualmente están teniendo problemas para encontrar profesionales cualificados por falta de disponibilidad, por lo que esperan que se ralenticen los plazos de entrega de los proyectos. Eso sí, remarcan que en ningún caso se van a posponer o frenar obras, sino que se va retrasar su desarrollo y, por tanto, su culminación.

En este sentido, explican que uno de sus principales desafíos está siendo encontrar la maquinaria pesada necesaria para el movimiento de tierras, fase inicial de cualquier construcción. Los medios son limitados y los que están vacantes se han encarecido entre un 20-30%, como también esta sucediendo con la mayoría de materiales de construcción, lo que también pone en jaque al sector.

De hecho, según el último informe de la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de infraestructuras (Seopan) a cierre de 2024 continuaba el encarecimiento de los precios de determinados materiales básicos iniciada en 2023, tras la crisis inflacionista de 2020-2022. Así, subió el acero (+36%), cemento (+5,6%), aluminio (+12%), electricidad (+54%) y gas (+30%), pero, además, en la Comunitat Valenciana los repuntes se han agudizado por el incremento de obras y la estrecha oferta de medios.

 

Unas subidas que ya preveía la construcción hace meses ante la tensión entre la alta demanda actual por el gran volumen de trabajo y una oferta que no puede cubrir esas necesidades. Especialmente llamativas son las alzas del acero y el hormigón, esenciales en cualquier construcción. Solo el hormigón ha subido de media 10 euros el metro cúbico, lo que también está encareciendo las obras. Así, la Administración pública ha tenido que elevar los precios en los contratos de emergencia por el encarecimiento de los costes. 

"Los precios de los materiales de construcción están subiendo, como es lógico por la tensión de medios y el crecimiento de la demanda. Sobre todo, la subida más notable la están experimentando el acero y el hormigón, que son los materiales más utilizados", explica el presidente de la Federación de Contratistas de Obras de la Administración de la Comunitat Valenciana (Fecoval), José Luis Santa Isabel.

Falta de mano de obra

No solo el desvío de medio y la subida de precios preocupa, sino también la falta de mano de obra. Los profesionales de oficios vinculados con la construcción como instaladores, pintores o fontaneros también están colapsados por los trabajos de reconstrucción, retrasando, a su vez, otro tipo de proyectos fuera del ámbito postdana. Y es que la escasez de oficios y de trabajadores en la construcción es un problema que existe desde hace años en el sector, pero que las necesidades por la catástrofe ha acentuado.

De hecho, la construcción lleva años alertando de la importancia de atraer talento y nuevos perfiles profesionales. No obstante, ahora se han evidenciado estas carencias ante el gran volumen de obras en marcha tanto de reparación y rehabilitación tras las inundaciones, como las de la actividad cotidiana y diaria. "Con la crisis de 2008 se destruyó mucho empleo y ahora tenemos un parque de instaladores y especialistas muy pequeño y que no da a basto", explican desde el sector.

Por ello, tanto la Fundación Laboral de la Construcción como Labora han incrementado itinerarios formativos que puedan aportar perfiles al sector, que ya se están demandando. Además, desde Fecoval defienden agrupar por zonas geográficas todas las obras de reconstrucción de la Dana en grandes lotes, para ser más eficaces. "Esta medida sería beneficiosa tanto para la Administración como para las empresas constructoras, ya que permitiría tener los medios agrupados en las zonas afectadas y ser más eficientes en recursos y plazos de ejecución.", defienden desde la patronal de la obra pública valenciana.

 

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