VALENCIA. La primera fase del proceso de recorte de sueldos en Feria Valencia ya está en marcha. La dirección de la entidad, dirigida por Enrique Soto, está negociando con un reducido grupo de altos directivos las retribuciones que perciben, pese a no ejercer plenamente las funciones que se les atribuyen, según fuentes conocedoras del proceso.
Se trata de directivos que mantienen un cargo en la institución y perciben por ello un alto sueldo. Su presencia se atribuye a "circunstancias del pasado" que la nueva dirección quiere corregir para eliminar "incoherencias".
Cuando se defina el alcance de las rebajas de sueldos entre este colectivo, se establecerá la cantidad que se debe reducir al resto de la plantilla para llegar al objetivo de recortar los costes salariales un 20%. Las negociaciones se completarán a lo largo de la semana para poder presentarlas, previsiblemente el viernes, al comité de empresa.
SEMANA DE NEGOCIACIONES
Será después de esta reunión cuando se celebre la asamblea de trabajadores en la que se expondrá la situación y se presentará la propuesta de la dirección para reducir los sueldos de los trabajadores, si esta ya ha sido entregada a los representantes sindicales.
Aunque la negociación con los altos directivos se realizará de forma individual, para el resto de la plantilla el alcance de la bajada de sueldos se fijará según niveles de retribución. De este modo, los que perciben los sueldos más bajos serán los que menos porcentajes de nómina vean recortada.
Fuentes implicadas en el proceso apuntan que la duración del ajuste salarial dependerá de los resultados de la entidad. La idea inicial es mantenerlo hasta que Feria Valencia vuelva a dar beneficios y se hayan saldado las deudas con los proveedores.
OBJETIVO: VOLVER A BENEFICIOS
Hasta que la entidad no se haya puesto al día con sus acreedores no se procederá a la recuperación de las retribuciones actuales. Aunque no hay fechas para cumplir este objetivo y se está pendiente de la aprobación de un plan de futuro, se descarta someter al personal a un nuevo expediente de regulación de empleo (ERE).
En enero del pasado año, se alcanzó un acuerdo para la reducción de plantilla que significó el despido de 106 de los 320 trabajadores que hasta entonces tenía la entidad. De esta cantidad, 34 fueron prejubilados y el resto fueron indemnizados en función de su edad.
