La Generalitat Valenciana ha sacado a información pública el borrador del nuevo Reglamento del Registro de Cooperativas de la Comunitat Valenciana, una norma que pretende modernizar y digitalizar por completo la gestión registral de las entidades cooperativas. El texto sustituirá al Decreto 136/1986, de 10 de noviembre, vigente desde hace casi cuatro décadas, y marca un paso decisivo en la adaptación del sistema cooperativo valenciano a la administración electrónica.
La propuesta, elaborada por la Dirección General de Trabajo, Cooperativismo y Seguridad Laboral de la Conselleria de Educación, Cultura, Universidades y Empleo, actualiza de manera integral los procedimientos de constitución, calificación, inscripción, depósito de cuentas y certificación de las cooperativas. Con su publicación en información pública, la Generalitat abre el proceso de participación ciudadana para que entidades, organizaciones y particulares puedan presentar alegaciones antes de su aprobación definitiva por el Consell.
Uno de los pilares del borrador es la implantación generalizada de la tramitación electrónica, que pasará a ser el canal ordinario para todos los procedimientos registrales. De este modo, tanto las cooperativas como los notarios o representantes podrán realizar gestiones telemáticas —desde la inscripción de una nueva entidad hasta la solicitud de certificaciones— con firma y sello electrónico. La iniciativa responde a la Ley 6/2024 de Simplificación Administrativa, al Decreto 54/2025 de Transformación Digital, y a las Leyes 39/2015 y 40/2015, que fijan la digitalización como principio básico del funcionamiento del sector público.
El nuevo reglamento busca reducir tiempos y cargas burocráticas, agilizar los trámites y garantizar una mayor transparencia. Entre las medidas más destacadas se encuentran la creación de procedimientos abreviados para la constitución, disolución y liquidación de cooperativas, así como la reducción de plazos para la emisión de certificaciones, que deberán resolverse en un máximo de 15 días hábiles. También se eliminan pasos administrativos considerados redundantes, en línea con la estrategia autonómica de simplificación y eficiencia.
En cuanto a la estructura, el Registro se configurará como único para toda la Comunitat Valenciana, pero con una organización territorial descentralizada compuesta por una oficina central y tres oficinas territoriales, ubicadas en València, Castellón y Alicante. Todas ellas estarán conectadas digitalmente y compartirán un mismo sistema de gestión, con el fin de garantizar la interoperabilidad y el acceso ágil a la información.
El borrador también amplía los libros oficiales del Registro, que pasarán a gestionarse íntegramente en formato electrónico, y refuerza los principios de publicidad, legalidad, prioridad y tracto sucesivo. Las certificaciones y notas simples se emitirán en formato electrónico con plena validez jurídica, lo que permitirá mejorar la trazabilidad y la seguridad documental de los procedimientos.
La norma dedica un apartado específico a la protección de datos personales, en coherencia con la Ley Orgánica 3/2018 y el Reglamento General de Protección de Datos (UE). Asimismo, establece un sistema de digitalización y conservación de expedientes que sustituirá progresivamente el soporte en papel y permitirá mantener la integridad de los registros históricos mediante su preservación digital.
El texto incorpora además una función consultiva que permitirá a la Confederación de Cooperativas de la Comunitat Valenciana plantear consultas interpretativas al Registro, cuyas respuestas podrán hacerse públicas cuando tengan interés general. También regula los procedimientos de reconocimiento de cooperativas no lucrativas, de utilidad pública o de iniciativa social, con el fin de simplificar su tramitación y dotarla de mayor agilidad.