VALENCIA. "La barra libre de subvenciones ha terminado". Con estas palabras ha resumido Joaquín Ríos Casanova, director general de Industria, la nueva estrategia de la Conselleria de Economía para incentivar el emprendedurismo e impulsar el desarrollo de las empresas de la Comunitat Valenciana.

Según ha adelantado Ríos Casanova en la presentación de los Premios Emprendedores XXI de La Caixa, la Generalitat espera tener terminado después del verano un nuevo proyecto para el reparto de ayudas públicas con cambios sustanciales.

Aunque el equipo del conseller Máximo Buch preferiría tenerlo acabado y dispuesto para su aplicación antes de esa fecha, "los tiempos de la Administración no son los que nos gustaría a todos", reconoce el director general, procedente de la empresa privada.

SUBVENCIONES, BAJO CONDICIONES

El proyecto parte de la necesidad de rentabilizar al máximo los fondos disponibles, por lo que se quiere condicionar la entrega del dinero al cumplimiento de unos criterios entre los que destaca el uso simultaneo de créditos y ayudas, condicionando la una a la otra.

Actualmente, la Generalitat está valorando en qué porcentaje se repartirán los fondos de los que se disponga entre subvenciones y préstamos. Sin embargo, Ríos Casanova da por hecho que se condicione el pago de las subvenciones a la devolución del 75% de los prestamos públicos que se concedan a los beneficiarios.

La intención de la Generalitat es respaldar con estas ayudas a las empresas que planteen proyectos innovadores o modelos de base tecnológicas, por su mayor potencial de desarrollo y su condición de alternativa verosímil a la industria tradicional o al sector servicios, según fuentes de la conselleria.

PRESTAMOS ESPECIALES

Los préstamos no serían participativos, sino de tipo convencional. Esto significa que, en el caso de que el proyecto fracase, el beneficiario debería encontrar los medios de pagarlo. La razón de este cambio sobre el planteamiento defendido hace meses por el conseller Buch, está en los requisitos que impone Bruselas a los fondos disponibles.

En todo caso, estos préstamos se concederían en condiciones ventajosas, frente a las ofertas existentes actualmente en el mercado. En este proyecto una de las claves será la transformación del actual Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) en un banco especializado en la concesión de préstamos para emprendedores, planteado en la remodelación del sector público empresarial.