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Las matriculaciones de turismos crecerán en 2010, pese a la caída del segundo semestre

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MADRID (VP/EFE). El mercado de automóviles de turismo se espera que cierre 2010 con un leve crecimiento en torno al 3%, pese a haber padecido una segunda mitad del ejercicio con caídas mensuales continuas, casi siempre por encima del 20%.

A este retroceso continuo se une diciembre, que se prevé que concluirá con 68.500 turismos matriculados, en torno al 25% por debajo del resultado del mismo mes del año pasado.

De este modo, el registro global de matriculaciones en 2010 se situará sobre las 981.500 unidades, frente a las casi 952.800 de 2009.

En dos partes tan diferenciadas durante el año recién terminado ha jugado un papel protagonista el Plan 2000E, que el Gobierno prorrogó para 2010 con unos requisitos que el sector automovilístico, de inmediato, advirtió de que no se podrían extender más allá de junio.

Así ha sido, y el mercado del automóvil español ha discurrido entre julio y diciembre sin ayudas, y con el añadido de una subida del IVA en dos puntos porcentuales que, según todas las fuentes del sector, también ha influido en las fuertes bajadas de estos últimos seis meses, por la incidencia que la medida ha tenido en el consumo.

El ejemplo más fehaciente es que en la segunda mitad de 2009, con la primera fase de las ayudas del Plan 2000E en todo lo alto, se matricularon en España 519.699 turismos frente a los 377.338 que se esperan en el mismo periodo de este año, es decir 142.631 unidades menos en términos absolutos y un retroceso del 27,4% en términos relativos.

Las distintas asociaciones del sector han expresado su preocupación por el actual comportamiento del mercado automovilístico.

Los fabricantes, por ejemplo, han recalcado que mercados por debajo del millón de turismos vendidos disuaden a los grandes fabricantes de renovar inversiones para nuevos productos en las plantas españolas y eso, a la larga, se puede traducir en una fuga hacia los mercados emergentes de las marcas instaladas con estructura fabril.

Los importadores, concesionarios y vendedores han admitido que se ha constituido una red de distribución para mercados en el entorno de los 1,5 ó 1,6 millones de unidades, y en la situación actual, muy por debajo de esa cifra, no queda más recurso que recortar esa estructura, que ya ha sufrido la pérdida de 30.000 empleos, y a los que se pueden sumar otros 10.000 en el breve plazo.

La actual coyuntura del mercado no tiene visos aparentes de mejora, pues el sector de forma unánime apuesta para este año por un mercado entre los 850.000 y los 900.000 turismos matriculados en las actuales circunstancias de fuerte crisis económica, desconfianza del consumidor y una Administración que no atiende a medidas de estímulo.

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