VALENCIA (VP/EFE). El presidente del Colegio de Economistas de Valencia, Leopoldo Pons, comentó ayer que la solución a la situación de Caja Mediterráneo (CAM) pasa por que el Gobierno se haga cargo de ella, la adquiera a precios nominales y nombre un equipo profesionalizado para gestionarla.

Después de eso hay que "aguantar el vendaval" y esperar a que la entidad tenga un valor capital "de verdad" para poder transmitirla y así se evitaría "el colapso y el derrumbe" de una entidad de la magnitud de la CAM, comentó.

Pons, que se pronunció sobre la caja alicantina durante una rueda de prensa para presentar su libro 'La economía de la crisis 2009-201. Una revisión quincenal', precisó que el camino es la adquisición inmediata, "no la nacionalización" ni la intervención.

La CAM es "el primer banco grande que entra en crisis en España" con la paradoja de que el problema que se ha creado se tiene que resolver en el ámbito nacional a pesar de que en los órganos de dirección de las cajas de ahorro están representados los ayuntamientos y las comunidades autónomas.

Pons se refirió a la solución de crisis financiera que han dado otros países como Suiza que adquirió UBS; Suecia, que se hizo cargo de ocho bancos en crisis, los reflotó y luego los vendió; e Inglaterra y Estados Unidos.

En el caso de la CAM, habría que tomar una medida "urgente y drástica" ya que la fórmula de la adquisición supondría disolver las estructuras de gobierno actuales que, a su juicio, no están técnicamente capacitadas para poder gestionar esta crisis, en relación al modelo de representación.

Ese proceso de adquisición y nombramiento de un equipo gestor profesionalizado se podría instrumentalizar a través de la SEPI, una fórmula que, según Pons, podría funcionar.

Sobre las cajas que han rechazado el proyecto de fusión con la CAM, ha señalado que todas las cajas no son iguales y tienen funcionamientos diferentes, como Cajastur, que no tiene "ninguna dificultad en su gestión".

El economista manifestó que la situación de la CAM no va a poner en peligro a los ahorradores ni a los cuentacorrentistas, y ha aventurado que España no será penalizada por el colapso de determinadas entidades financieras.

El presidente del Consejo General de Colegios de Economistas de España, Valentín Pich, agregó que la "partida" del sector financiero aún no se ha terminado y ha destacado que lo importante es que el sector haga bien los proyectos familiares y empresariales de inversión y gestión del ahorro.

Pich indicó que la "moda de meterse" con el regulador, el Banco de España, es preocupante porque el órgano ha dicho muchas cosas "por activa y por pasiva" en sus informes de los últimos años.