VALENCIA. Los gastos financieros de la Generalitat han aumentado un 41,2% entre junio de 2011 y el mismo mes de 2012, alcanzando los 474,09 millones de euros. En este capítulo se incluyen los pagos de los intereses de la deuda y las amortizaciones que la Generalitat ha ido realizando sin la ayuda del Estado.
Este dato se extrae del estado de tesorería de la Generalitat, la diferencia entre lo que se ha cobrado y lo que se ha pagado, que ha publicado este viernes el Diario Oficial de la Generalitat (DOGV) y que señala un saldo positivo de 333,5 millones de euros a 30 de junio de 2012. Esta cantidad es un 14% superior a la registra el año pasado y pasa de un flujo de tesorería negativo en 2011 de 320,9 millones a uno positivo de 72,6 millones.
Sin embargo, esta situación no debe animar a echar las campanas al vuelo, ya que está distorsionada por los pagos acogidos al plan de proveedores del Gobierno central que significó una entrada en la partida de cobros de 4.300 millones, en concepto de pasivos financieros, y otra partida por la misma cantidad en la de gasto en concepto de fondos extrapresupuestarios que no está separa sino repartida entre las distintas entidades que utilizaron ese dinero para pagar las facturas pendientes.
Para hacerse una idea más aproximada de la situación real de los cobros y los gastos de la Generalitat, hay que analizar los otros capítulos que no son los activos y pasivos financieros. En todo caso, la tesorería no muestra los ingresos y los gastos de la Administración valenciana, sino lo que lo que cobra y paga, quedando fuera de la tabla lo que se contrata y no se ha pagado, o sea nuevas deudas con proveedores.
SÍNTOMAS DE NUEVOS IMPAGOS
En todo caso, sí se puede observar el efecto de las reducciones de personal realizadas hasta el mes de junio, que se concretan en una reducción en el pago de nóminas de 93,98 millones de euros, destinándose en este trimestre 2.417,71 millones de euros, frente a los 2.511,69 millones del mismo periodo del año anterior.
También se aprecia una rebaja en los gastos de funcionamiento, que en el estado de tesorería de junio de 2011 apunta 1.201,4 millones, mientras que en este año ha sido de 1.013 millones, 188,4 millones menos. No sólo el recorte en este apartado es mayor, sino que porcentualmente significa un 15,6% del gasto en este concepto, frente al 3,7% de lo que se ha rebajado en gastos de personal.
Que no se hayan pagado estos gastos de funcionamiento no significa que se debieran pagar, por lo que en esta cantidad estarían parte de los nuevos impagos de la Administración valenciana, denunciados por distintas entidades y empresas.
A pesar de las medidas de reducción en otros apartados, lo que no perdonan son los bancos. El pago de intereses y algunas amortizaciones (las principales han sido cubiertas por el Estado desde el pasado mes de diciembre) se ha incrementado un 41,2%, pasando de 335,63 millones a 474,09 millones a 31 de junio de 2012.
BAJADA EN EL PAGO DE SUBVENCIONES Y AYUDAS
Los pagos de las transferencia corrientes (que incluyen tanto el gasto farmacéutico, como los colegios concertados) han bajado de 1.942 millones a 1.511 millones en el último año, un 22,1% menos. Esta diferencia de 431 millones se debe a la supresión de determinadas ayudas, pero también al impago de otras comprometidas, según distintas fuentes.
Como estaba previsto, las inversiones reales se han reducido en el último año más de un tercio, pasando de 381,9 millones a 200,8 millones, justificada en buena medida por la paralización de obras en machar, la finalización de algunas y la no ejecución de las nuevas.
Por último, las trasferencias de capital, que incluye las subvenciones de la Generalitat para las inversiones que realicen las principalmente las empresas públicas, han bajado un 44,7%, situándose en los 284,1 millones frente a los 635,3 de hace un año. En este capítulo se recogen las subvenciones que concede la Generalitat con el fin de financiar las inversiones y operaciones de capital fijo de las entidades que sean beneficiarias.
