Empresas

El mayor portacontenedores del mundo, el MSC Pamela

Los trabajadores del hotel Sidi Saler proponen a la dirección bajar las tarifas 'de lujo' para aumentar los ingresos

Suscríbe al canal de whatsapp

Suscríbete al canal de Whatsapp

Siempre al día de las últimas noticias

Suscríbe nuestro newsletter

Suscríbete nuestro newsletter

Siempre al día de las últimas noticias

VALENCIA (L. MASERES). Ni los tiempos son los que eran, ni tampoco sus clientes. Las cinco estrellas del hotel Sidi Saler de Valencia no brillan como antes y su dirección quiere convertirlo en un recinto abierto solo por temporadas. Además de la estrategia planteada por los gestores, los trabajadores apuntan hacia un cambio de filosofía a merced de la crisis económica. Bajar los precios y adecuarlos a la realidad podría ser una de las soluciones que salvaría al lujoso edificio de la debacle.

"El hotel necesita adaptarse a la nueva realidad. La clientela pide bajo coste, lo que quiere decir que se debería replantear la filosofía de la empresa", afirmó a Valenciaplaza.com Mateo Torres, presidente del comité de empresa del Sidi Saler de Valencia. Torres, que retomará hoy las negociaciones con la dirección tras anunciar esta semana el cierre del hotel desde mediados de enero hasta Semana Santa, además de su intención de cambiar los contratos fijos de sus empleados por fijos discontinuos, aseguró que de no llevarse a cabo medidas, la empresa entraría en una situación compleja en la que no se descartaría su cierre.

BAJAN LOS INGRESOS Y SUBE LA DEUDA

La desplome de los ingresos del hotel viene produciéndose, según el comité, desde 2008, año en el que descendieron "más de un 40%". Según los últimos datos de Informa, el balance de Sidi Hoteles SA (cuya sede está en Alicante, donde está el Sidi San Juan) de 2008 fue de 14,2 millones de euros, con un resultado negativo de 2,5 millones. La empresa está presidida por Stier Manfred y José Ignacio Raposo es el director del hotel valenciano

Además de esta caída, el activo total de la empresa bajó un 6,5% entre 2007 y 2008 y el patrimonio neto lo hizo un 68%. Según los datos de Informa, el endeudamiento creció un 0,6%. Este digital intentó, sin éxito, contrastar estas cifras con la dirección del hotel.

Las salidas que plantea la empresa para recuperarse de los tres últimos años -en diciembre de 2010 hubo un día en el que no tuvieron ni un solo cliente-, es cerrar durante los meses de invierno y abrir de primavera a otoño y cambiar el tipo de contrato que tienen los 80 empleados del hotel. Al menos por el momento no se ha planteado ningún despido.

Como explicó Torres, la modificación de los contratos de fijos a fijos discontinuos no beneficia a los trabajadores, por lo que hoy intentarán negociar un ERE temporal que les permita mantener sus puestos incluso en horas bajas. "La continuidad del hotel existe a menos que no se tomen medidas, pero después de tres años malos mucho tendremos que trabajar para compensar lo que no se gane con el cierre", declaró el presidente del comité.

NADA QUE HACER CON EL AVE

A la propuesta del ERE temporal, los trabajadores suman otra: bajar los precios. Según Torres, no se puede mantener un hotel cinco estrellas y un restaurante "cuatro tenedores" con una gran plantilla cuando los clientes buscan precios económicos. "Lo que sustentaba el hotel en invierno, como los congresos, el golf o los viajes de negocios ha caído. Este tipo de clientela ha fallado y no ha habido forma de mantenerla. Las familias piden otras cosas", destacó Torres.

El optimismo con el que los empresarios del sector de la hostelería y los políticos valencianos abrazaron la llegada del AVE el pasado mes de diciembre, y que supuestamente va a empujar a la economía local y a atraer negocios a la Comunitat, no es tal en el Sidi Saler. Según los trabajadores del hotel, si los empresarios madrileños tienen ahora la posibilidad de viajar a Valencia en poco más de hora y media se volverán a sus casas en el mismo día. "No se si repercutirá, pero lo veo complicado", afirmó Torres.

La reunión de hoy, en la que los empleados no confían alcanzar un acuerdo a pesar de la relación de cordialidad que mantienen con José Ignacio Raposo, director del hotel desde hace unos ocho años aproximadamente, pueden sentarse las bases del futuro de la empresa. "La decisión parece estar tomada ante la prisa que tienen por cerrar el tema y no seguir perdiendo dinero, así que será difícil hacerles cambiar de opinión", zanjó Torres.

Recibe toda la actualidad
Valencia Plaza

Recibe toda la actualidad de Valencia Plaza en tu correo