VALENCIA. El iPhone 6 y el iPhone 6 Plus, los dos últimos smartphones lanzados por Apple, comenzarán a venderse en Valencia a partir de mañana cuando la tienda de la compañía estadounidense abra las puertas de su establecimiento en la calle Colón. Por el momento tan solo son algunos los que han ‘acampado' en la misma puerta del número 25 de la calle comercial, mientras que alrededor de la puerta se organiza el dispositivo de seguridad habitual para la tienda en estas situaciones.

Los más fanboys de la marca quieren ser los primeros en conseguir alguno de los dispositivos, además de que -tras varios lanzamientos ‘a la espera' de un nuevo gadget- esperan que la marca tenga algún detalle con ellos a lo largo de la noche o con el desayuno de la mañana. No obstante, ni los propios empleados de la tienda conocen si existen este tipo de obsequios este año con tal de preservar siempre el factor sorpresa para los clientes que ya están en la cola. De esta forma, estos serán algunos de los primeros en tener el nuevo modelo presentado hace tan solo unas semanas en California, Estados Unidos.

De manera espontánea arranca una noche -sin previsión de lluvia- en la que estos usuarios de dispositivos Apple podrán comentar las primeras reseñas de los dos nuevos dispositivos iPhone. Además de que la marca de Cupertino haya decidido retirar su última actualzación de sistema operativo (iOS 8.1.), durante las dos últimas jornadas se ha repetido la crítica de que estos dos nuevos gadgets se doblan con cierta facilidad. De hecho, existen no pocas videoreseñas que muestran esta flaqueza por los materiales del dispositivo.

No obstante, los geeks que esperan a la puerta de la Apple Store Valencia son auténticos seguidores de la empresa fundada por Steve Wozniack y Steve Jobs ya que, actualmente, la compañía ofrece un servicio de prereserva sin pago por adelantado que permite recoger el iPhone durante el día de mañana sin colas y sin riesgo de ‘quedarse' sin el dispositivo.

Aun así, hacer cola es una tradición para los fanboys de Apple. En ciudades como Nueva York éstas tienen hasta cierta tradición mediática (especialmente por parte de medios y blogs especializados). Además, son utilizadas por algunas pequeñas o medianas empresas para publicitarse.