VALENCIA. El presidente de la Cámara de Comercio de Valencia, José Vicente Morata, ha asegurado que en el proceso de venta del Banco de Valencia se hizo "el menor daño posible" y considera que la venta a La Caixa fue "una buena noticia".

En todo caso, niega cualquier implicación personal en el proceso, ya que fue administrador temporal de la entidad en Valencia cuando fue intervenido por el Estado, pero las decisiones y la negociación de venta se realizó desde los organismos correspondientes del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) en Madrid.

Ante las críticas que se han vertido hacia él por su gestión en ese periodo, Morata advierte que sólo estuvo en el cargo cinco meses (de julio a noviembre de 2012), el que fue "el peor momento de la historia", con la prima de riesgo en los 650 puntos, "sin financiación para nadie", los mercados cerrados e "intentos de todo tipo" contra la economía española.

LA CRISIS Y LAS CAJAS DE AHORRO: CAUSA O EFECTO

Respecto a la gestión de las entidades, el presoidente de la Cámara de Comercio de Valencia asegura que no sabe "si Bancaja y Banco de Valencia han sido la consecuencia o la causa de la crisis".Para Morata, las cajas de ahorro en toda España entraron a "hacer cosas que no debieron hacer nunca", como competir con los promotores inmobiliarios "y se pasaron".

Salvo Caixa Ontinyent en Valencia o la catalana Caixa Pollença, el responsable empresarial considera que "el resto de entidades hicieron lo mismo". Un pecado en el que también incurrió el Banco de Valencia.