VALÈNCIA. La finalidad de una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) Pediátrica y Neonatal es cuidar la salud de los niños graves, mediante una atención sanitaria efectiva y de calidad en el tratamiento. Los que requieren ingreso en estas unidades son aquellos que presentan las situaciones más graves, como los grandes prematuros, infecciones graves como meningitis o sepsis, crisis asmáticas o bronquiolitis graves, pacientes descompensados como los casos de debut diabético, traumatismos o postoperatorio de cirugías complejas.
También es corriente tratar enfermedades que, aunque habitualmente no requieran atención en cuidados intensivos, por su gravedad sea necesaria la vigilancia y el tratamiento en la unidad, como es el caso de las neumonías, crisis asmáticas graves, infecciones víricas (por ejemplo, la gripe o la bronquiolitis).
En este campo, la UCI Pediátrica y Neonatal del hospital Vithas Valencia 9 de Octubre es un referente dentro de la sanidad privada valenciana y es una de las unidades de mayor peso, ya que todo lo relacionado con la maternidad siempre ha sido uno de sus pilares. En Vithas Valencia 9 de Octubre son conscientes de que el respaldo de una UCI Neonatal y Pediátrica completamente equipada y con un amplio equipo de profesionales para atender a todo tipo de prematuros o nacidos a término, sea cual sea su patología, es la mejor garantía para padres y ginecólogos a la hora de elegir un centro para dar a luz.
En este sentido, el hospital Vithas Valencia 9 de Octubre cuenta con un amplio equipo de profesionales, coordinado por los doctores Javier Miranda y Salvador Martínez, responsables de la unidad de pediatría, e integrado por 15 pediatras y 40 enfermeros y auxiliares, con cobertura durante las 24 horas, todos los días del año, mediante el trabajo de profesionales con la debida formación y experiencia. Además, mantienen el calendario de sesiones clínicas y unos protocolos actualizados, que garantizan la máxima adecuación a la asistencia y contribuyen a la formación continuada de los profesionales. Tal como explica el doctor Miranda, “todo pediatra que se dedique a una subespecialización, particularmente a los Cuidados Intensivos, debe tener un conocimiento específico del área concreta a la que se dedica; una actitud profesional que se oriente hacia el trabajo en equipo; una serie de aptitudes personales que van desde la empatía en el trato con los familiares, al temple para lidiar con situaciones difíciles; y una adecuada motivación”.