ALICANTE. El pasado domingo, Benidorm acogía el ensayo de la contestación en las calles a las nuevas medidas de Sanidad para limitar horarios y espacios en el sector hostelero. Este jueves, las protestas se trasladarán a Alicante y Elche, con el repaldo de sus compañeros benidormenses (que tienen previsto desplazarse a la capital alicantina), para seguir mostrando el rechazo del sector al cierre de pubs y la limitación horaria y de espacios de bares y restaurantes.

En el caso de Alicante, el acto está convocado por las principales asociaciones del sector, como informó Alicante Plaza este miércoles: Alroa (pubs), ARA (restaurantes) y Apeha (hostelería). Las tres han organizado la manifestación a las 19.00 horas frente a la Subdelegación del Gobierno en la Plaza de la Montañeta, para mostrar su disconformidad con la ampliación de las restricciones. Una "protesta cívica" que con el lema "Salvemos la Hostelería" espera ser multitudinaria, a pesar de que se ha comprometido a respetar la distancia de 1,5 metros entre los participantes y en la convocatoria se indica que la mascarilla es obligatoria.

La concentración busca protestar por la orden de cierre de los locales de ocio nocturno (discotecas, salas de baile, karaokes, pubs...), así como por la limitación horaria de los bares a la 1 de la madrugada y el aumento de la distancia entre mesas con la consiguiente limitación de aforo. A las asociaciones alicantinas se sumarán representantes de sus homólogos en Benidorm, como Aico, Ociobal y Abrace.

Por su parte, en Elche la concentración se llevará a cabo por la tarde, en paralelo a la de Alicante, pero en la plaza del Centro de Congresos, convocada por la Asociación de Hosteleros de Elche. De esta manera, los hosteleros ilicitanos se suman a los establecimientos de ocio nocturno para mostrar su rechazo a una decisión que consideran injusta.

La vicepresidenta de la Asociación de Hostelería de Elche, Francisca Soles, señalaba este miércoles en declaraciones a Efe que el sector está en contra del cierre a la 1 de la madrugada para cumplir las normas de seguridad, “cuando la sociedad no las cumple”. Soles apuntaba además que las ayudas del Ayuntamiento al sector “llegan a cuentagotas” y muchos de los negocios no pueden optar a ellas, por lo que necesitan más apoyo.