VALÈNCIA. Si uno mira a su alrededor y se fija en cada una de las personas que pasean junto a su lado, verá que son muchos los rasgos físicos que los diferencian. Cada persona tiene una información genética que es única y que la distingue de cualquier otra persona. Y, aunque gracias a la ciencia se sabe que los seres humanos comparten el 99.9% de ADN, hay un 0.1% de la información genética que hace que cada uno tenga un código de barras particular. Este código de barras se conoce también como la huella genética, tal y como informa en un comunicado el centro médico de reproducción asistida Crea.

Según el centro ubicado en Valencia, la huella genética se puede utilizar tanto para diferenciar personas como para relacionarlas entre sí, ya que personas de la misma familia muestran huellas genéticas similares que hacen que se les pueda emparentar genéticamente a unos con otros.

Es aquí donde Crea pregunta qué pasaría, entonces, si se necesitase confirmar la filiación en los casos en que no hay un vínculo genético entre los padres e hijos. Una cuestión para la que presentan esta respuesta: "Disponer previamente de la huella genética de los hijos permitiría acreditar oficialmente su filiación en caso de necesitarlo".

"Todos conocemos familias en las que no existe ese vínculo genético entre sus miembros, como puede ser el caso de las adopciones. Lo mismo les ocurre a aquellas madres y padres que han tenido a su hijo gracias a las técnicas de Reproducción Asistida con intervención de donante. Para estos casos, la idea es que puedan tener un documento que identifique a esos niños como hijos suyos, ya que no coincidirán genéticamente al haber utilizado gametos de donante o embriones donados por otras parejas" subrayan en el escrito.