VALENCIA. La valenciana Germaine de Capuccini estudia abrir una nueva filial, esta vez en en EE UU. La buena marcha de la firma de alta cosmética la ha llevado a plantearse dar el salto a la nación norteamericana tras los problemas con los que se han topado sus filiales en Chequia y Venezuela.

Las intenciones de la mercantil alcoyana se expresan de forma directa en las cuentas depositadas por su matriz -Grupo Germaine de Capuccini- en el Registro mercantil, en las que también manifiesta sus planes en Europa y Centroamérica. "Se va a potenciar tanto la filial italiana como la dominicana y se está analizando la posibilidad de abrir una filial en Estados Unidos".

La empresa, sin embargo, ha tenido que cerrar Germaine de Capuccini Ceska. Como informó este diario, la matriz "está en estos momentos procediendo a su liquidación y tratando de proceder a la venta del intangible que supone suposición en el mercado". La filial cerró 2014 con un resultado negativo de 110.192 euros.

En cuanto a la sociedad venezolana, denominada Delorme SA, las cuentas detallan que "debido a la situación política en Venezuela, en 2014 ya no se ha realizado venta alguna". "Se está estudiando la posibilidad del cierre de la actividad comercial de la misma", añaden. Además, Germaine de Capuccini cuenta con un problema añadido en el país, al poseer un total de 7.406.368 bolívares -el equivalente a 1,06 millones de euros- atrapados por la inflación de la nación.

Grupo Germaine de Capuccini facturó 26,4 millones de euros en 2014, prácticamente la misma cifra que el año anterior. Por lo que respecta a su resultado, registró un beneficio de 820.000 euros frente a las pérdidas de 932.000 euros con las que cerró 2013.