VALENCIA. Un total de 12,3 millones de euros. Este fue el resultado neto de la empresa de transporte Llácer y Navarro SL en su primer ejercicio tras superar el concurso de acreedores, circunstancia que cabe atribuir, como suele ocurrir con muchas firmas que superan situaciones de insolvencia, a la aplicación de una quita por parte de los acreedores. El importe neto de los beneficios, también cumpliendo la lógica habitual, se destinó a cubrir las pérdidas de ejercicios anteriores.

En el caso de Llácer y Navarro SL, tal y como consta en las cuentas de 2014 depositadas por la firma en el Boletín Oficial del Registro Mercantil, la quita fue del 50% de la deuda, un montante próximo a los 20 millones de euros.

Tras el acuerdo alcanzado y la aplicación de dicha quita, la sociedad presenta un balance de situación asequible, con pasivos a largo plazo de 16,9 millones de euros y pasivos a corto plazo de 2,2 millones. La deuda con la que ahora carga la firma es de 19,1 millones, de los que 13,6 corresponden a deudas con entidades de crédito y 5,5 a deudas comerciales.

En la misma línea, al cierre del ejercicio anterior, Llácer y Navarro presentaba un patrimonio neto negativo de 12,4 millones de euros que, tras la aprobación del convenio de acreedores -como consecuencia de la quita- tornó a positivo, en concreto a 1,8 millones.

Además, según consta en el informe de gestión de la sociedad, en 2014 incrementó las reservas voluntarias en algo más de 2 millones de euros por la anulación de las actas levantadas por la Agencia Tributaria en el ejercicio anterior.

Por lo que respecta a la facturación de la sociedad, en 2014 sufrió una acusada caída en los ingresos, que pasaron de alrededor de 93 millones a cerca de 80, lo que supone un descenso del 14%.