BRUSELAS. La Comisión Europea aprobará el próximo 17 de marzo una directiva para que los estados cumplan con el pago a los proveedores en 30 días. Había dos años de plazo para que los estados transpusieran esta orden, aprobada en 2011, si bien España los ha apurado sin ejecutarla y ahora tendré que activarla de forma obligatoria.

Así lo confirmó el secretario general del PSPV, Ximo Puig, tras reunirse este martes con Diego Canga, director del gabinete del vicepresidente de la Comisión Europea y Comisario de Industria, Antonio Tajani.

Después del encuentro, el líder del PSPV anunció que el grupo parlamentario socialista presentará en Les Corts una iniciativa para que el Consell se comprometa a cumplir esta directiva europea que entrará en vigor en diez días.

Además, Puig anunció que se reunirá con distintas organizaciones empresariales y colectivos de proveedores para trasladarles el contenido de esta directiva europea y para informarles de las medidas que pueden adoptar los afectados, entre los que se pueden encontrar las demandas judiciales pertinentes.

En caso de que la Generalitat no afronte los pagos en 30 días, deberá pagar intereses de demora del 8%, algo sobre lo que pone el acento Ximo Puig: "Lo que no puede ser es que los proveedores sean los que paguen la ineficiencia de la Generalitat. Tal vez con esta medida el Consell de Alberto Fabra busque soluciones para pagar en tiempo y forma", subrayó el secretario general del PSPV.

Fuentes europeas han subrayado que podrán aplicarse sanciones para los estados que no cumplan con esta nueva directiva. Éstas pueden consistir en la disminución de fondos o en multas económicas.

La directiva aprobada por la Unión Europea no tendrá carácter retroactivo, si bien Puig puso el acento en la búsqueda de soluciones para la deuda acumulada y las facturas en el cajón en la Comunitat Valenciana.

XIMO PUIG SE REÚNE CON ALMUNIA

Por otro lado, el secretario general del PSPV se reunió este miércoles con el vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de la Competencia, Joaquín Almunia. En este encuentro, Puig le trasladó a necesidad de lograr todos los fondos posibles para sacar a la Comunitat de la situación en que se encuentra, por lo que consideró "necesario" que la Unión Europea "tome conciencia de la realidad" que viven nuestras regiones y los ciudadanos en estos momentos y, por tanto, "actúe en consecuencia".

En este sentido le planteó a Almunia las distintas posibilidades de ayuda para "la regeneración de nuestro tejido industrial" y para comenzar "la necesaria política postladrillo", al tiempo que apeló a la "Europa solidaria que no deja al margen a aquel que está en una peor situación".