MADRID (AGENCIAS). El Consejo General de Cámaras de Comercio aceptó ayer la dimisión del presidente, Javier Gómez-Navarro, que presentó su renuncia después de haber fracasado en su intento de parar la reforma de la ley que elimina la obligación de pagar la cuota cameral a las empresas. La eliminación está vigente ya para las pymes y a lo largo de este año se podrán acoger todas las empresas.

La modificación legislativa, aprobada por el Gobierno el pasado mes de diciembre, supone un duro golpe tanto a las finanzas de estas organizaciones empresariales (unos 250 millones de euros anuales, el 60% de sus ingresos) como a su propio estatus, ya que al no existir la obligación de estar inscrito pueden perder parte de su influencia y funciones. 

Las marcha de Gómez-Navarro, que había sido renovado el pasado mes de junio por cuatro años más pese a las críticas que recibió de la patronal CEOE, abre un proceso electoral en el seno de la máxima institución cameral. Los 88 presidentes de las cámaras españolas y los ocho notables (entre los que está el expresidente de la Cámara de Valencia, Arturo Virosque) que componen el pleno están convocados para el próximo 3 de mayo para elegir al nuevo dirigente. 

Hasta entonces, Gómez-Navarro, que formalmente ha esgrimido "motivos personales", permanecerá en el cargo hasta entonces. El presidente del organismo debe elegirse en ese pleno extraordinario. Fuentes próximas a las cámaras, citadas por Europa Press, señalaron que los presidentes de lde Navarra, Barcelona y Zaragoza, Javier Taberna, Miquel Valls y Manuel Teruel, respectivamente, se perfilan como los posibles candidatos a sustituir a Javier Gómez-Navarro.