VALENCIA. “La eficiencia energética es una herramienta estratégica en la competitividad de la industria y el tejido empresarial”. Natxo Costa, director general de Comercio y Consumo de la Generalitat Valenciana realizó estas declaraciones el pasado viernes en la sesión de apertura de la segunda edición del Seminario Fulton, la cual ha compartido con Vicente Navarro de Luján, director de Proyección Cultural de la Universidad CEU Cardenal Herrera, y con Luis Romero, director general del Grupo Fulton.

En una linea similar se manifestó Luis Romero: “Se debe evitar caer en el error de considerar que los servicios energéticos son una externalización del servicio, cuando en realidad son una herramienta eficaz para las administraciones y las empresas”, recalcó, ante el centenar de participantes, todos ellos representantes de la administración local y del sector empresarial energético.

Por la jornada pasaron diferentes alcaldes de varios municipios de Aragón, Catalunya y la Comunitat Valenciana, como Juan Ramón Adsuara de Alfafar (Valencia) o Juan Carlos Gracia de Alcañiz (Teruel). Como también munícipes de Monreal del Campo (Aragón), El Campello (Alicante) o La Palma d’Ebre (Catalunya). Todos ellos protagonizaron el panel de experiencias sobre las ventajas de la aplicación de la eficiencia energética en la gestión de servicios municipales.

También el Seminario contó con la participación de Rafael Monterde, director general de la Fundación InnDea Valencia, el cual impartió una ponencia sobre la promoción estratégica, el desarrollo y la innovación urbana. La sesión de clausura la protagonizaron Vicente Lafuente, presidente de la Federación Empresarial Metalúrgica Valenciana Femeval y Miguel Muñoz Veiga, decano del Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de la Comunitat Valenciana.

La importancia de la eficiencia energética en la gestión municipal es evidente, como lo demuestran las cifras aportadas por el IDAE (Instituto de Diversificación y Ahorro de Energía), las cuales señalan que el consumo de electricidad del alumbrado exterior de los más de 8.000 municipios que hay en España supone el 2% del consumo nacional y un coste de casi 700 millones de euros.