NOVELDA. En la década de los 90, con Salvador Sánchez Arnaldos como alcalde, Novelda inició las obras de lo que iba a ser un obra flamante: un velódromo, una instalación que tenían pocos municipios de la Comunitat y que estaba llamada a ser un atractivo para los ciclistas de la provincia. Hoy, 25 años después, el velódromo sigue sin estar acabado, pese a varios intentos fallidos.

Ahora, el Ayuntamiento de Novelda ha sacado a licitación las obras para la restauración de la instalación después de que la Generalitat Valenciana haya dado el visto bueno a la modificación del proyecto inicial, por valor de 442.500 €, cantidad pendiente de ejecutar de la subvención finalista concedida en el marco del Plan de Inversiones Productivas (Plan Confianza).

Las obras tendrán una ejecución  de seis meses y permitirá desbloquear una actuación paralizada administrativamente desde que en 2009 fracasara su finalización por incumplimiento de la entonces empresa adjudicataria de la reforma. 

Según explica el alcalde, Armando Esteve, se ha optado por un rediseño de la obra, “menos pretencioso que el original, pero más realista y práctico, adaptado al presupuesto subvencionado".  Para ello, el proyecto adaptado del velódromo contempla la finalización pavimentada del foso central y bordeado de la pista de rodamiento, que será acondicionada para salvar  desperfectos y fisuras. Además, incluye la construcción de vestuarios, enfermería y zona de almacenamiento bajo las gradas. Asimismo, el resideño prevé una reducción del aforo, que queda limitado a 200 espectadores en las gradas y sesenta usuarios en pista, según ha explicado Esteve.

El alcalde de Novelda, Armando Esteve, con representantes del sector ciclista del municipio.