VALENCIA. El Ssangyong Korando es un todocamino de bonitas líneas y buenas prestaciones que ha llamado su atención desde su lanzamiento por el particular diseño de sus líneas y por su capacidad interior.

Los puntos fuertes de este modelo de Ssangyong están en la buena capacidad del modelo, su comodidad y las destacables líneas de su diseño realizado por Guigiaro. Pero, sin duda, la característica menos conocida por el consumidor es el excelente precio del modelo, circunstancia en la que gana a sus competidores de segmento.

El Korando dispone hasta el momento de una sola motorización de ciclo diesel y 175 Cv de potencia, una excelente motorización que le aporta prestaciones muy destacables, dispone de mucha fuerza, recupera bien y los consumos son razonablemente contenidos. La novedad en la unidad probada está en el cambio automático que incorpora desde hace unos meses, la comodidad de este cambio está fuera de toda duda y las prestaciones con él son excelentes.

Como se ha comentado, el espacio interior es sobresaliente, mucha comodidad para las plazas delanteras y traseras y un amplio maletero de 486 litros. Se le puede considerar, por lo tanto, un modelo muy adecuado para los desplazamientos largos.

El Korando es un SUV al uso, dispone de una altura libre al suelo de 18 cm, suficiente para circular fuera del asfalto pero no para realizar conducción TT, y a pesar de esta característica típica en su segmento dispone de prestaciones suficientes para pasar por zonas difíciles y con mala adherencia, bien sea por pavimento deslizante o por caminos de piedras y tierra. Para mejorar estas características, el Ssangyong Korando se puede adquirir con tracción al tren delantero o tracción total conectable automáticamente.

Se trata de un modelo cómodo de conducir, con una buena superficie acristalada que le aporta visibilidad. Su comportamiento es muy correcto, las suspensiones son muy cómodas, algo que agradecen los ocupantes del vehículo. A la hora de circular por zonas urbanas se trata de un vehículo ágil y nada aparatoso, circunstancia que lo convierte en un modelo idóneo para el uso cotidiano.