VALENCIA. El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, defendió en una misa el miércoles a la familia cristiana ante la escalada del "imperio gay" y "ciertas ideologías feministas". Unas manifestaciones que hicieron arder las redes sociales y que provocaron respuestas incluso de cargos públicos como el portavoz de Compromís en Les Corts, Fran Ferri, quien ironizó colgando una imagen de Darth Vader enarbolando una bandera del Orgullo LGTB acompañado del hashtag #STOPLGTBFOBIA para después añadir un tuit de protesta más formal.
Reacción más contundente fue la del concejal del Ayuntamiento de Valencia Carlos Galiana, quien colgó una foto besándose con su marido con el libro de familia y un Twitter.
Carlos Galiana y su pareja en respuesta a Cañizares.En este sentido, no es extraño escuchar comentarios dentro de las distintas formaciones políticas acerca de, por ejemplo, el llamado 'lobby gay' de Compromís en el Ayuntamiento de Valencia. Unas menciones similares a las que, en otro tiempo, también se dirigían a la dirección del PSPV en la etapa de Jorge Alarte como líder de los socialistas valencianos.
Curiosamente, la formación que suele guardar silencio públicamente cuando se producen manifestaciones como la de Cañizares es el PPCV. Sin embargo, y así lo admiten fuentes populares, existe un buen número de jóvenes, especialmente en Nuevas Generaciones, que son gays y que, por consiguiente, muestran su acuerdo en privado con los derechos LGTB. No obstante, en la mayoría de casos prefieren eludir la visibilidad como personas LGTB.
Bien es cierto que todos los grupos, incluido el PPCV, firmaron al inicio de la legislatura una declaración institucional expresando su "denuncia explícita" contra la homofobia, lesbofobia, bifobia y transfobia, así como el apoyo "activo" al asociacionismo LGTB+ en la lucha contra "cualquier tipo de discriminación hacia ese colectivo".
Sin embargo, y pese a que existe respaldo oficial en este tipo de cuestiones, no parece que se den las circunstancias adecuadas para 'salir del armario' y acometer una defensa pública constante y firme desde el PP o más concretamente desde Nuevas Generaciones sobre estas cuestiones.
Mientras diversas fuentes de la formación popular conocedoras de esta realidad subrayan que es una decisión "personal", no son pocos los que también admiten que la actual presidenta regional, Isabel Bonig, posee un discurso marcadamente conservador que no invita a posicionarse públicamente en estas cuestiones.
