VALÈNCIA (VP/EP). La secretaria general del PSPV-PSOE en la ciudad de València, Pilar Bernabé, ha hecho balance de los dos años de pacto de PP y Vox en el Ayuntamiento de València y ha calificado de "negacionismo ultra" el gobierno que preside María José Catalá. Bernabé ha explicado que este negacionismo se materializa en torno al cambio climático, la crisis de la vivienda, la igualdad y la identidad valenciana.
En el plano económico, Bernabé ha censurado la gestión del ejecutivo local y ha reprochado que la oficina de atracción de inversiones Invest in Valencia "lleva en tres años cuatro gerentes", o que se haya liquidado Valencia Activa, un ente que bajo su mandato "era un ejemplo de políticas públicas de empleo", ha dicho. "Hoy València es una de las grandes ciudades donde más lentamente se reduce el paro femenino", ha criticado. "Claro que se notan las políticas negacionistas de PP y Vox", ha añadido.
La también delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana se ha pronunciado de este modo en la rueda de prensa que ha ofrecido para hacer balance de los dos años del pacto de gobierno. "Hoy se cumplen dos años del pacto del canapé, ese pacto de PP y Vox" en el ejecutivo "de la tercera ciudad más importante de España", ha expuesto.
Una ciudad "más sucia, más cara y más dividida"
Pilar Bernabé ha dicho que el "resumen" de la gestión de este equipo de gobierno es "una ciudad más sucia, más cara y más dividida" que mantiene "una agenda ultra" que lleva a convertir València "en una de las ciudades más negacionistas" de España. Así, ha apuntado que además de "negar el cambio climático", niega "la evidencia, por pura ideología para aplicar herramientas ante el principal problema de los ciudadanos, la vivienda".
La representante del PSPV-PSOE ha hecho un llamamiento a "recuperar la València referencia en Europa por su diversidad y su apuesta por el medio ambiente", un territorio "que cuida de sus barrios y de sus vecinos frente al negacionismo radical que practica el gobierno de Catalá" y que lleva a un modelo del "siglo pasado".
Igualmente, ha lamentado que el consistorio de la capital valenciana se use "como laboratorio de pruebas de lo que significa un gobierno de las derechas más extremas" y ha subrayado su voluntad de "devolver la esperanza" a la capital valenciana.
Respecto al negacionismo climático, Pilar Bernabé ha lamentado que el ejecutivo de Catalá haya optado por rechazar proyecto que hacían de esta una urbe "más sostenible y respetuosa con el cambio climático, en línea con la Capitalidad Verde Europea" que ostentó en 2024, "más verde y con más zonas peatonalizadas". Ha añadido que tras dos años de gestión de PP y Vox València es una ciudad con "20.000 coches más al mes" que se encuentra "en el top 100 de ciudades más congestionadas, con una contaminación disparada en todos sus barrios".
La también candidata a la Alcaldía para las próximas elecciones municipales, ha instado a recuperar la agenda de proyectos sostenibles con el Corredor Verde en el bulevar sur como principal actuación.
Sobre el negacionismo de la igualdad, Bernabé ha censurado "salidas de tono inasumibles para una ciudad como València con las que está poniendo en riesgo la celebración de los Gay Games". "Hasta la federación que los organiza ha subrayado que no se siente representado por este gobierno municipal ni por las políticas que desarrolla", ha remarcado.
En cuanto a la vivienda, la delegada del Gobierno ha afirmado que el ejecutivo de Catalá "niega la realidad y rechaza aplicar herramientas que ayudarían a mitigar" el "problema" en esta materia. Ha apuntado que, en consecuencia, la capital valenciana es "la ciudad española donde más han crecido los precios de la vivienda en el último año, hasta los 1.600 euros al mes de media de alquiler".
"Catalá y Mazón la misma cosa son"
Pilar Bernabé ha asegurado que si María José Catalá aplicase la Ley de la Vivienda los precios podrían bajar una media de 600 euros y ha insistido en que si no lo hace es "por pura ideología".
"Es incapaz de exigir nada a --el presidente de la Generalitat, Carlos-- Mazón porque, para ella, es un ejemplo de 'president'. Lo piensa y lo practica porque Catalá y Mazón la misma cosa son", ha aseverado.
Tras ello, ha remarcado que la alcaldesa no ha exigido al jefe del Consell que "cumpla con las mujeres y realice pruebas diagnósticas a las 30.000 a las que ha dejado fuera del cribado del cáncer de mama por culpa de la mala gestión de la Conselleria de Sanidad". Catalá "no defiende los intereses de sus vecinos", ha dicho.
Acento del topónimo
Pilar Bernabé ha aludido también "al negacionismo de la identidad de los valencianos" y ha hablado del "cambio de acento" en el nombre de la ciudad, de abierto a cerrado. Ha destacado que esa modificación ha recibido "más de 1.000 alegaciones por el ataque que representa a la lengua".
"Les molesta que ciudad sea una ciudad abierta y, por eso, cambia el acento para cerrarlo. No es postureo, es un ataque contra el valenciano, para relegarlo a la mínima expresión", ha añadido.
La secretaria general del PSPV-PSOE en València ha recordado el "gran pacto" ofrecido por los socialistas a Catalá "en materia de vivienda, para reservar al menos el 50% de viviendas públicas en los nuevos PAI, o para retomar la agenda de proyectos de renaturalización como el bulevar Cultural en Guillem de Castro o el Corredor Verde como un gran jardín y no como una carretera".
"Insultarla"
En respuesta a Pilar Bernabé, desde el ejecutivo local, el edil portavoz de este gobierno y portavoz del PP en la corporación municipal, Juan Carlos Caballero, ha manifestado que "lo que debería hacer la delegada ultrasanchista es trabajar en favor de València en lugar de insultarla".
"La delegada ultrasanchista niega a València un servicio digno de Cercanías, condenando a miles de familias a tener que usar el coche porque el gobierno de --Pedro-- Sánchez es incapaz de ofrecer un transporte ferroviario en condiciones", ha expuesto Caballero en declaraciones remitidas a los medios de comunicación.
El representante del equipo de Catalá ha añadido que el Ejecutivo central "niega la financiación y las infraestructuras que necesita la ciudad, como el soterramiento del túnel de Serrería" y "la celebración de Acontecimientos de Especial Interés Público para proyectos tan relevantes como la Capital Verde Europea o los Gay Games".
Juan Carlos Caballero ha lamentado que el Gobierno de España también niegue "la interlocución para resolver el conflicto del Sidi Saler, demostrando que València siempre es la última". "La única negacionista aquí es la delegada ultrasanchista, que niega para València lo que aplaude para otras ciudades: el progreso, las inversiones, la ejecución de proyectos, la igualdad de trato y el respeto institucional", ha aseverado.
