VALÈNCIA (EP). La organización criminal dedicada al tráfico de cocaína a gran escala en el Puerto de València, que ha sido desarticulada por la Policía Nacional, utilizaba el Centro Portuario de Empleo para elegir a los estibadores, mediante el amaño de exámenes o la falsificación de test de drogas, para controlar la ubicación de los contenedores que contenían alijos de drogas y alertar de posibles operaciones policiales.
Así lo han detallado este viernes en rueda de prensa el comisario jefe de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Valencia; el comisario jefe de la Brigada Central de Apoyo de la Comisaría General de Policía Judicial y el inspector jefe de Sección de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) de Valencia.
A principios de 2024, la Policía Nacional inició la operación Spider, que se ha saldado con la detención de un total de 81 personas, entre ellas tres del cártel de los Balcanes, dos de organizaciones criminales colombianas, 17 trabajadores portuarios y un miembro de la Guardia Civil, entre otros.
Se han llevado a cabo 59 entradas y registros domiciliarios, 53 de ellos fueron simultáneos este lunes, en las localidades valencianas de València, Bétera, Alboraia, Picassent, Chiva, Benetússer, el Perellonet, Balcón de Montroy, la Pobla de Vallbona, Canet d'en Berenguer, Sueca, Godelleta, Albalat dels Tarongers, Mislata, Aldaia, Puçol, Massamagrell, Massalfassar, Sedaví, Algemesí, Quart de Poblet y Sagunt, así como en la isla de Ibiza.
En la operación los agentes han intervenido más de 4,5 toneladas de cocaína, 365.000 euros en efectivo y diversas armas de fuego, tales como un rifle, una escopeta, tres revólveres, un arma corta, dos bolígrafos pistola, dos armas simuladas, abundante munición y tres táser, entre otros.
El comisario jefe de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Valencia ha detallado que en esta operación se han frustrado ocho operaciones de extracción de cocaína y han desarticulado "prácticamente toda la arquitectura delincuencial", no únicamente los eslabones más bajos, con la implicación de personal del Puerto, entre ellos estibadores, camioneros, empresarios del sector del transporte, los cuales estaban "perfectamente coordinados mediante una clara división de tareas".
Entre ellos, ha destacado la detención de representantes sindicales, un médico y personal relacionado con el Centro Portuario de Empleo, mediante los que "la estructura delincuencial tenía pleno dominio sobre los procesos de selección de estibadores, amañando exámenes y falsificando tests de drogas".
Así, adjudicaban las jornadas y el puesto de trabajo de los estibadores para que estos controlaran cómo colocar los contenedores que contenían droga y alertar de operaciones policiales. Además, cuando se producía alguna operación policial con la detención de algún estibador, si este entraba en prisión los empleados del centro de empleo portuario "falsificaban documentos para simular una excedencia con fecha anterior a la detención, para que cuando cumpliera condena volviera a trabajar en la estiba sin problema".
"Se autodenominaban 'la llave'"
El comisario ha precisado que se han detectado dos organizaciones independientes, "con intereses propios pero que comparten sinergias y recursos clave cuando les interesa". Al frente del cartel estaban tres estibadores y un aspirante a la estiba, quienes "se autodenominaban como 'la llave' porque sentían que eran la llave de la puerta de entrada de la cocaína por el Puerto de València".
Además del narcotráfico, la organización dominaba un entramado empresarial que permitía introducir los beneficios generados por el tráfico de drogas en el flujo legal de capitales. Los agentes se han incautado de numerosos bienes de lujo, entre los que destacan 53 vehículos de alta gama, una embarcación valorada en 400.000 euros, 60 relojes de prestigiosas marcas, diversas joyas, diamantes y lingotes de oro.
Estructura de la organización
Por su parte, el inspector jefe de Sección de la Udyco de Valencia ha desgranado la estructura de la organización y ha insistido en que "lo que distingue a esta operación de otras" ha sido la capacidad de llegar a todos los eslabones de la cadena. En concreto, ha detallado que los miembros de organizaciones criminales extranjeras se desplazaban o tenían asentados en España a miembros para gestionar los envíos de cocaína.
Estos trataban con los líderes de la organización en València para el envío de alijos. Los narcotraficantes valencianos "constituían la cabeza de la organización criminal" y se hacían cargo del alijo "desde que el contenedor sube al buque hasta que llega a España".
Para ello, ha continuado, estos contaban con narcotraficantes con contactos nacionales, quienes eran "encargados de hacer de cortafuegos", sin contacto directo con los líderes, para que la caída del eslabón inferior no supusiera la detención de los jefes. Estos tenían capacidad para negociar envíos con los narcotraficantes internacionales y contratar equipos de extracción para sacar la droga del Puerto.
Otro eslabón era el de los trabajadores portuarios, lo que "no les eximía de ser lideres de la organización algunos de ellos", con empleados en la estiba para "dar seguridad al equipo de extracción".
La organización también disponía de empresas que le dieran acceso al Puerto, con empresas de transporte que introducían a camioneros como autónomos para realizar las extracciones. El sexto eslabón lo componían los "facilitadores críticos", para facilitar la cobertura legal para blanquear dinero.
Por último, se sitúan los equipos extracción, con varios métodos sofisticados para extraer la cocaína del interior del Puerto, para lo que contaban con "hombres araña" que escalaban por los contenedores al objeto de acceder a la mercancía ilícita.
Un Guardia Civil entre los detenidos
La operación policial ha supuesto la detención de un total de 81 personas, incluidos tres varones pertenecientes al cártel de los Balcanes, dos que forman parte de organizaciones criminales colombianas, 17 trabajadores portuarios, nueve camioneros, 17 responsables de cinco mercantiles, así como un miembro de la Guardia Civil, quien actuaba como intermediario entre el cártel y las organizaciones criminales sudamericanas, facilitando la importación de cocaína. Las detenciones se han producido principalmente en la provincia de Valencia, así como en Burgos, Algeciras e Ibiza.
Las investigaciones continúan abiertas al objeto de identificar a otros miembros de la organización y comprobar posibles conexiones con anteriores aprehensiones de droga.
La operación 'Spider' ha culminado con el despliegue de más de 450 efectivos de diferentes unidades, como las Brigadas Provinciales de Policía Judicial y Seguridad Ciudadana de Valencia, la Comisaría General de Policía Judicial, así como el Grupo Especial de Operaciones (GEO), Grupos Operativos Especiales de Seguridad (GOES), la Unidad Aérea de la Policía Nacional, la Unidad de Intervención Policial (UIP), la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) y el Grupo Operativo de Intervenciones Técnicas (GOIT). En alguna de las incautaciones se ha contado también con la colaboración de otros cuerpos policiales.