VALÈNCIA (P.G/EP). El gobierno de María José Catalá se ampara en un informe de la secretaría municipal sobre el sector público fundacional del Ayuntamiento de València, para justificar el cierre de València Activa y la "fusión" de las fundaciones València Clima i Energia y el CEMAS. El informe, firmado el 6 de mayo, pero que fue encargado por la Dirección General del Sector Público el 25 de abril, según sostienen fuentes de Alcaldía, plantea dudas sobre la idoneidad de estos tres entes autónomos como prestadores de servicios públicos, pero "salva" de la reestructuración a las fundaciones Visit València y Las Naves. De estas últimas, la secretaría señala que llevan a cabo actividades "acordes con su naturaleza fundacional".

Tal y como señaló Valencia Plaza, la moción firmada por José Gosálbez para la liquidación de València Activa, empleaba argumentos extraídos de este informe de la secretaría municipal que abrían la puerta a revisar otras fundaciones. Era el caso por ejemplo del hecho de que València Activa no generase ingresos propios. El informe -al que ha tenido acceso este periódico- señala la dependencia de fondos públicos tanto de València Activa como de las otras dos fundaciones que se pretende fusionar. Por el contrario, en las fundaciones Las Naves y Visit València, el informe no menciona en ningún momento su modelo de financiación, pese a que por ejemplo Las Naves tampoco genera ingresos propios.

València Activa

Sobre la fundación de empleo el informe apunta que "parece oportuno realizar una reflexión sobre la idoneidad" de este ente para prestar un servicio público cuando ya existen los servicios municipales de Empleo y Emprendimiento. El documento sostiene que València Activa se comportaba "parcialmente" como "una forma municipal de prestar servicios, lo cual, en puridad, no es correcto por cuanto las fundaciones no son entes instrumentales de la entidad local para la prestación de servicios", según establece la Ley reguladora de las bases de régimen local. Asimismo, cuestiona que la fundación sea "el medio instrumento jurídico adecuado para prestar servicios de competencia local puesto que su base legal resulta en la actualidad dudosa". El documento, aunque no señala expresamente la liquidación como una solución, consideraba conveniente "clarificar" la gestión del consistorio en materia de empleo "diferenciando nítidamente entre qué se hace directamente con el servicio de empleo" y qué a través de la fundación.

Clima i Energia y CEMAS

En el caso de la Fundación València Clima i Energia y CEMAS, entidad esta última con la que se pretendió convertir la ciudad "en un centro de referencia a nivel nacional e internacional en materia de alimentación urbana sostenible", el informe recoge que sería conveniente "clarificar" la gestión del Ayuntamiento en materia de medio ambiente urbano, en el primer caso, y de agricultura, alimentación sostenible e imagen de la ciudad en el segundo, identificando lo que se hace directamente con el servicio de mejora climática y los municipales y con ambas fundaciones.

Según señala el documento, todas estas acciones "responden a políticas públicas" en sus respectivas materias que "probablemente, deban gestionarse mediante alguna de las formas previstas en la normativa para los servicios públicos municipales, lo que obliga a estudiar si la fundación es el medio instrumento jurídico adecuado para prestar" las materias que tiene encomendadas. En el caso de Clima y Energía, entiende que resulta "dudosa" la base legal de esa prestación de servicios de competencia local.

El equipo de gobierno señala que proseguirá "en la transformación" de ambas fundaciones para formar "un solo organismo municipal para luchar contra el cambio climático". Este será un nuevo "gran organismo que trabaje en políticas de sostenibilidad para preparar la ciudad ante un cambio climático que afecta a todo el planeta", explican desde el consistorio.

El informe "salva" las fundaciones de turismo e innovación

En el caso de las fundaciones Visit València y Las Naves, el informe analiza de forma mucho más breve su situación. Sobre Las Naves sostiene que su actividad "recae en gran medida dentro del ámbito de competencias propias de los municipios, así como en la posibilidad del ejercicio de actividades no lucrativas" y subraya que la entidad "se ha convertido en un referente en la innovación en la ciudad, siendo un instrumento colaborativo idóneo para potenciar alianzas y generar sinergias con otros actores, tanto públicos como privados, que desarrollan su actividad en Valencia, y promocionar en el exterior el conocimiento de la apuesta de la ciudad por la innovación y el desarrollo".

Sobre Visit València, apunta que resulta "idóneo que la actividad turística, que constituye una competencia tanto estatal, autonómica como local, sin que se configure como un servicio público, y en la que juega un papel fundamental el sector privado, desarrolle parte de su actividad en la ciudad de València de forma coordinada mediante una entidad con forma jurídica de Fundación, en la que sus distintos patronos, tanto públicos como privados, persiguen la consecución no lucrativa de una serie de fines de interés general para la ciudad".

Racionalizar el Sector Público Local

Cabe recordar que uno de los anuncios de Catalá al principio de su mandato fue la intención de llevar a cabo una “auditoría”, al margen de la Intervención General, de los entes autónomos del Ayuntamiento para "corregir las ineficiencias y reforzar su control, así como para la reordenación y racionalización de las entidades existentes”. Para ello, la alcaldesa creó la mencionada Dirección General del Sector Público, cuya titular es Ana María Gil, exgerente de Aumsa. Una de las primeras medidas en esta línea ya fue la supresión de la Fundación de la Policía Local y la integración de la Mostra en el Palau de la Música.