VALÈNCIA. Un reciente estudio de la compañía WeGrant, llevado a cabo entre más de 3.000 empresas, fundamentalmente pymes, ha puesto de manifiesto que el tejido empresarial español tiene un ambicioso plan de inversiones en cartera pero que no lo ejecuta a la espera de que aparezcan más ayudas públicas. 

Las empresas que participaron en el proyecto piloto del lanzamiento de Ulises concretaron más de 1.500 millones de euros en inversiones, fundamentalmente para transformación energética, digitalización y compra de maquinaria y tecnología. De acuerdo con su fundador, Fran Estevan: “Desde el punto de vista de la inversión empresarial la economía se ha ralentizado mucho en el último trimestre. La llegada de los préstamos provenientes de los Next Generation y el diseño de nuevos instrumentos financieros, más flexibles y cercanos a las empresas, serán fundamentales para que las pymes acometan sus planes de inversión”.

Se espera que en los próximos meses, tanto el ICO como las CC.AA, a través principalmente de sus agencias de innovación, pongan en marcha un ambicioso plan de más de 80.000 millones de euros al alcance de las pymes. Según Estevan, “la clave aquí estará en la bonificación y en las facilidades de acceso. Si el precio de los préstamos no supone un gran descuento y si los gestores burocratizan en exceso el proceso, las empresas acudirán a sus entidades en primer lugar. Es muy importante que la tecnología sirva aquí para ganar velocidad”.

Y en esa línea WeGrant ha lanzado Ulises, el simulador de ayudas públicas que permite obtener un informe individualizado de cómo conectar esos planes de inversión con ayudas de toda la UE, tanto presentes como futuras. Además, WeGrant conecta a sus clientes con alguna de las principales entidades financieras del país como Santander, Sabadell o Cajamar, para que la puesta en marcha de los proyectos tenga un acompañamiento financiero desde el principio que facilite la obtención de garantías y avales, principalmente.

¿Cómo funciona Ulises?

La empresa introduce sus necesidades de inversión (personal, inmovilizado, material, I+D, necesidades de liquidez…) y los algoritmos de Ulises cruzan esa información con los programas de ayudas públicas activos y le devuelve al usuario un ranking de las ayudas más afines. “Esto hace posible lograr una gestión automatizada, más accesible, transparente y eficaz, así como una reducción de los tiempos de solicitud y obtención de subvenciones. No existe nada similar en el mercado y ahí es donde nuestra tecnología representa un salto cualitativo”, asegura Estevan, que destaca además que es la primera vez que se diseña una herramienta que permite trabajar con ayudas públicas a quienes no están acostumbrados al lenguaje de la administración pública.