VALÈNCIA. Verdifresh, proveedor de Mercadona de ensaladas y comida preparada a base de hortalizas, cerró el pasado ejercicio de 2023 con una facturación de 124,7 millones de euros, un 3% más que en 2022, cuando rozó los 121 millones de euros, según consta en sus cuentas anuales depositadas en el Registro Mercantil.
Asimismo, la firma, propiedad de Joaquín Ballester Martinavarro, aumentó su beneficio de los 4 millones a los 8,3 millones obtenidos el pasado ejercicio. De ellos, 6 millones se repartieron en dividendos, mientras que 2,3 millones fueron a reservas voluntarias. También, la compañía valenciana mejoró su Ebitda hasta los 10,6 millones de euros, un 50% más que un año antes.
La empresa, perteneciente al Grupo Foodiverse, anteriormente Grupo Alimentario Citrus (GAC), desarrolla su actividad en sus plantas productivas de Riba-Rojadel Turia (Valencia), Antequera (Málaga) y Aranda de Duero (Burgos). La compañía trabaja para un único cliente, la cadena de Juan Roig.
De este modo, Verdifresh logró la mayor parte de su facturación por la venta de ensaladas a la cadena de supermercados, que supusieron 101,3 millones del total de su cifra de negocio, un 24,6% más que en 2022 cuando alcanzó ventas por valor de 97,3 millones. Por su parte, los complementos pasaron de representar 22,7 millones a 23 millones, un 1,3% más, mientras que por la prestación de servicios, la firma facturó 283.000 euros frente a los 465.127 euros del año anterior.
De cara a este ejercicio 2024, la compañía asegura, en la memoria de gestión que acompaña a sus cuentas, que "orientará su gestión a consolidar su posición en el mercado, mediante el impulso de la acción comercial, el incremento de la calidad de servicio, el control de costes y la máxima eficiencia en sus operaciones".
"Por tanto, en el ejercicio 2024, sin que nos podamos sentir ajenos a la evolución de los factores económicos, pensamos que, continuando en la línea de esfuerzo iniciada en pasados ejercicios, podemos ofrecer resultados positivos", subraya la empresa.